¿Cuándo no se debe podar?

Tiempos Prohibidos para la Poda: Evitando Daños a los Árboles y Arbustos

La poda es una tarea esencial para el mantenimiento del jardín, pero hay momentos específicos en los que no se debe realizar. Evitar la poda en estos períodos garantiza la salud y el bienestar de los árboles y arbustos.

Otoño: Después del Amarilleo de las Hojas

Una vez que las hojas de los árboles y arbustos caducifolios comienzan a cambiar de color y caer, entra en juego un proceso fisiológico llamado latencia. La latencia es un período de inactividad en el que las plantas se preparan para el invierno.

Durante la latencia, los árboles y arbustos almacenan energía en sus raíces y troncos. Podarlos durante este tiempo puede eliminar las reservas de energía y dejar las plantas vulnerables a enfermedades y plagas. Además, las heridas de poda pueden no cicatrizar adecuadamente, creando una entrada para patógenos.

Primavera: Desde la Hinchazón de las Yemas hasta el Desarrollo Completo de las Hojas

A medida que las temperaturas comienzan a subir en primavera, los árboles y arbustos salen de la latencia. Este es un período de crecimiento activo, cuando las yemas comienzan a hincharse y las hojas nuevas se desarrollan.

Podar durante este tiempo puede interrumpir el crecimiento y dañar las hojas tiernas y las flores. También puede estimular un nuevo crecimiento que será susceptible a las heladas tardías.

Excepciones

Hay algunas excepciones a estos períodos prohibidos de poda:

• Eliminación de ramas muertas o enfermas: Siempre es necesario eliminar las ramas muertas o enfermas independientemente de la época del año.
• Poda de árboles jóvenes: Los árboles jóvenes a menudo requieren una poda formativa para desarrollar una estructura sólida. Esto generalmente se lleva a cabo durante los primeros años de su vida.
• Poda de arbustos florecientes: Algunos arbustos florecientes, como las hortensias y las forsitias, deben podarse después de que hayan florecido para promover la floración en la próxima temporada.

Conclusión

Evitar la poda de árboles y arbustos caducifolios en otoño y primavera es crucial para su salud y bienestar. Podar durante estos períodos puede dañar las plantas y dejarlas vulnerables a enfermedades y plagas. Al adherirse a los tiempos adecuados de poda, los jardineros pueden garantizar que sus árboles y arbustos prosperen y agreguen belleza a sus paisajes durante los años venideros.