¿Qué día de enero es bueno cortar el cabello?

¿Qué día de enero se puede cortar el cabello para que crezca?

¡Ah, la eterna búsqueda de la melena digna de anuncio de champú! Resulta que el 18 de enero, bajo la celestial influencia de la luna cuarto creciente, es el día elegido por los astros (y las peluqueras supersticiosas) para darle un empujón a tu cabello. ¡Como si fuera una planta que necesita abono lunar!

Aquí te dejo algunos “tips” capilares que, según mi abuela (que tenía un pelazo envidiable, dicho sea de paso), te ayudarán a complementar esta fecha mágica:

• No te laves el pelo con agua de grifo los martes: ¡atrae la mala suerte capilar! Mejor usa agua de lluvia, si vives en un lugar donde llueve, claro. Si no, pues… ¡tampoco te obsesiones!
• Cepíllate el pelo 100 veces antes de dormir: ¡como Cenicienta, pero sin príncipe! Solo con un pelazo brillante.
• Usa mascarillas caseras: Yo una vez me puse mayonesa en el pelo ¡y casi llamo a los bomberos para que me la quitaran! Mejor prueba con aceite de coco, es menos pegajoso.

Ahora en serio (bueno, más o menos), la luna cuarto creciente supuestamente favorece el crecimiento del cabello. Si lo cortas en esta fase, se supone que crecerá más rápido y fuerte. Yo no sé si es verdad, pero mi vecina lo hace y tiene un pelo que parece una cascada. ¡Será la luna, será el champú, o será que tiene buena genética!

¡Ah! Y un consejo extra: si te cortas el pelo el 18 de enero y no ves resultados inmediatos, no te deprimas. ¡Siempre puedes echarle la culpa a Mercurio retrógrado! 😉

¿Cuándo cortar el cabello para que crezca fuerte y rápido?

En cuarto menguante… la luna menguante, dicen, para un pelo fuerte, ¿no? Como si las fases lunares fueran el secreto ancestral, como si la luna, allá arriba, realmente influyera en esta cabellera mía, tan rebelde, tan propia. Me pregunto si mi abuela, que tejía historias y trenzas con la misma destreza, creía en estas cosas.

Dicen que la fuerza gravitacional lunar disminuye en cuarto menguante. ¡Qué curioso! Nutrientes fluyendo cual río, alimentando la raíz, fortaleciendo cada hebra. Suena bonito, a magia antigua, aunque la ciencia… la ciencia dirá otra cosa, seguramente.

• Luna menguante: Corta. Para un pelo… ¿más fuerte?
• La luna, siempre la luna.

Y después pienso en mi pelo, en cómo cada corte es un pequeño ritual, una liberación. Recuerdo cuando me rapé la cabeza después de una ruptura… ¡Uf, qué tiempos! Nada de lunas, solo necesidad de cambio, de renacer. Quizá el secreto no esté en la luna, sino en la intención, en la energía que le ponemos a cada tijeretazo.

Más sobre la luna, porque sí:

• La luna llena: Dicen que atrae la abundancia.
• La luna nueva: Para empezar de nuevo, plantar semillas.
• La luna creciente: Para darle impulso a lo que ya está.

Pero al final, ¿quién sabe? Quizá mañana me corte el pelo en luna llena, solo por llevar la contraria. Y si crece fuerte y rápido, pues… ¡que viva la luna!

¿Cuándo es mejor cortarse el pelo?

¡Ay, el dilema capilar! A ver, ¿cuándo darle un tijeretazo a la melena? Pues depende, ¡como si no lo supieras!

• Si quieres que te crezca el pelo a lo Rapunzel, córtate las puntas como mucho cada dos meses. ¡Es como podar una planta para que eche flores! Más o menos… ¡Vaya comparación!
• ¿Te apetece un cambio radical digno de estrella de Hollywood? ¡Pues lánzate cuando te sientas más diva que nunca! Con la energía por las nubes, vamos.
• ¡Ojo con la luna! ¡Algunos juran que la luna creciente es la peluquera cósmica ideal! Yo no sé si creerlo, pero por probar… ¡que no quede!

Datos extra, porque sí:

• Mi experiencia personal: Una vez me corté el pelo en un arrebato de locura (¡culpa de la luna, seguro!). ¡Acabé pareciéndome a un champiñón! Moraleja: ¡piénsatelo dos veces!
• El calendario capilar: ¡No te olvides de los eventos importantes! ¡No querrás ir a la boda de tu prima con un corte de pelo de “recién levantada”!
• Las peluquerías: ¡Ah! Y recuerda reservar en la peluquería con tiempo. Que luego pasa como cuando intentas comprar entradas para el concierto de tu artista favorito: ¡agotadas!

¡En resumen!

Córtate el pelo:

• Cada mes y medio/dos meses para que crezca.
• Cuando te sientas a tope.
• En luna creciente… por si las moscas.
• ¡Y nunca, repito, NUNCA, el día antes de una cita importante!