¿Qué pasa después de quitarte un lunar?

¿Qué ocurre después de una extirpación de un lunar?

Tras la extirpación de un lunar, también conocido como nevus, es común experimentar una serie de efectos posteriores. Estos efectos varían según el método de extirpación utilizado y el tamaño del lunar.

Dolor y sensibilidad

Inmediatamente después de la extirpación, es probable que sientas dolor y sensibilidad en la zona afectada. Estos síntomas suelen desaparecer en unos pocos días, pero pueden persistir más tiempo si el lunar era grande o profundo.

Inflamación y enrojecimiento

Es normal que la zona tratada se inflame y enrojezca después de la cirugía. Esta hinchazón suele alcanzar su punto máximo entre 24 y 72 horas después de la extirpación y debería ir disminuyendo gradualmente con el tiempo.

Curación

El tiempo de curación varía según el método de extirpación utilizado:

• Afeitado: Si el lunar se ha afeitado, la incisión suele cicatrizar en pocos días.
• Escisión: La escisión implica eliminar el lunar y un área de piel circundante. El tiempo de curación suele ser de 7 a 10 días.
• Láser: La extirpación con láser generalmente produce tiempos de curación más rápidos, de aproximadamente 1 a 2 semanas.

Cuidados posteriores

Es crucial seguir las instrucciones de cuidado posterior de tu médico para garantizar una cicatrización óptima:

• Mantén la zona limpia: Lava suavemente la zona afectada con agua y jabón varias veces al día.
• Aplica ungüentos antibióticos: Tu médico puede recetar un ungüento antibiótico para prevenir infecciones. Aplícalo según las indicaciones.
• Evita nadar o mojar la zona: Mantén la incisión seca hasta que se cierre por completo.
• Evita la exposición al sol: Protege la zona tratada del sol utilizando protector solar o vendajes.
• Limita la actividad física: Evita actividades extenuantes o que puedan ejercer presión sobre la zona afectada.

Cuándo llamar al médico

En la mayoría de los casos, la extirpación de un lunar es un procedimiento sencillo que cicatriza rápidamente. Sin embargo, es importante estar atento a los siguientes síntomas que podrían indicar una infección o complicaciones:

• Dolor, enrojecimiento o hinchazón intensos o persistentes
• Secreción de la incisión
• Fiebre o escalofríos
• Dolor o entumecimiento alrededor de la incisión

Si experimentas alguno de estos síntomas, ponte en contacto con tu médico inmediatamente.