¿Cómo pulir un metal rayado?

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Para lograr un acabado espejo en mi chapa metálica rayada, emplearé un proceso de lijado progresivo seguido de pulido con máquina rotativa y un kit específico, que incluye pastas abrasivas de grano fino a extrafino. El objetivo es eliminar los arañazos y obtener una superficie reflectante.
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Cómo pulir un metal rayado para obtener un acabado espejo

Los arañazos en el metal pueden ser frustrantes, pero con el proceso adecuado, es posible restaurarlos a un acabado brillante y reflectante. Este artículo te guiará a través de un método paso a paso para pulir metal rayado, logrando un acabado similar al de un espejo.

Materiales necesarios:

  • Papel de lija de grano 120, 320, 600, 800, 1000, 1200
  • Pulidora rotativa o taladro con accesorio de pulido
  • Kit de pulido que incluya pastas de pulido de grano fino a extrafino
  • Paños de microfibra

Pasos:

1. Lijado progresivo:

  • Comienza con papel de lija de grano 120 para eliminar los rayones profundos.
  • Trabaja gradualmente hasta papel de lija de grano 320, luego 600, 800, 1000 y 1200.
  • Siempre lija en la misma dirección, siguiendo la veta del metal.

2. Limpieza:

  • Limpia la superficie del metal con un paño limpio y alcohol isopropílico para eliminar cualquier residuo de lijado.

3. Pulido con pasta:

  • Aplica una pequeña cantidad de pasta de pulido de grano fino al accesorio de pulido.
  • Trabaja en secciones pequeñas, aplicando presión constante y movimiento circular.
  • Cambia a pastas de pulido más finas (grano medio, grano fino, extrafino) en sucesión para eliminar gradualmente los arañazos más finos.

4. Limpieza final:

  • Limpia la superficie pulida con un paño de microfibra para eliminar cualquier residuo de pulido.

Consejos adicionales:

  • Utiliza un soporte para la pieza metálica para un lijado y pulido más estable.
  • Mantén la pulidora rotativa a una velocidad baja para evitar sobrecalentamiento.
  • Humedece ligeramente el papel de lija para reducir el polvo y mejorar el acabado.
  • Ten paciencia y tómate tu tiempo durante el proceso para obtener los mejores resultados.

Siguiendo estos pasos, puedes restaurar el metal rayado a un acabado espejo brillante, eliminando los arañazos y revelando la belleza del metal subyacente.