¿Cómo se creó la luz eléctrica?

Cómo surgió la luz eléctrica

Contrariamente a la creencia popular, Thomas Edison, el ingenioso científico británico, no inventó la bombilla. Más bien, perfeccionó un diseño preexistente en 1879, allanando el camino para la iluminación eléctrica práctica.

El concepto de iluminación eléctrica había estado dando vueltas durante algún tiempo antes de los esfuerzos de Edison. En 1802, el científico británico Humphry Davy demostró la primera lámpara eléctrica al hacer pasar corriente a través de un cable de platino. Sin embargo, su invención era demasiado tenue y efímera para uso práctico.

A lo largo del siglo XIX, varios inventores intentaron crear una bombilla más duradera y eficiente. Joseph Swan, un científico británico, había estado experimentando con filamentos de carbono en ampolletas de vacío desde 1860. En 1878, logró producir una lámpara que brillaba durante unos 13,5 horas.

Mientras tanto, Edison trabajaba en un enfoque similar. Se centró en encontrar un material de filamento que pudiera soportar altas temperaturas sin quemarse. Después de experimentar con una asombrosa gama de materiales, incluida la seda, el bambú y el cabello, finalmente encontró el éxito con el algodón carbonizado.

El 21 de octubre de 1879, Edison presentó su nueva bombilla al mundo. Con su filamento de algodón carbonizado de larga duración alojado dentro de una ampolla de vacío, había creado una fuente de luz práctica y eficiente que superó con creces los intentos anteriores.

La creación de la bombilla de Edison marcó un hito en la historia de la iluminación. Proporcionó una alternativa segura y confiable a las lámparas de aceite y gas, transformando hogares, empresas y ciudades por igual. Y aunque Edison no inventó la bombilla, su perfeccionamiento del diseño allanó el camino para la iluminación eléctrica generalizada que disfrutamos hoy.