¿Cuándo empiezan a ser los días más largos en España?

La lenta y esperada victoria de la luz: ¿Cuándo comienzan los días a alargarse en España?

El invierno, con su abrazo gélido y sus días cortos, puede sentirse interminable. Pero en el corazón de la estación más fría se esconde una promesa: el regreso gradual de la luz. Para los españoles, ansiosos por el sol y las temperaturas más cálidas, la pregunta clave es: ¿cuándo empiezan a ser los días más largos?

La respuesta, aunque simple, es rica en simbolismo. El punto de inflexión no es un evento abrupto, sino un proceso sutil que comienza inmediatamente después del solsticio de invierno, alrededor del 21 de diciembre. Este día marca el punto álgido del invierno astronómico, el momento en que el hemisferio norte se encuentra más inclinado lejos del sol. A partir de ese instante, la duración del día comienza su lenta pero inexorable ascenso.

Aunque la diferencia en las horas de luz sea apenas perceptible durante los primeros días, el cambio es innegable. Cada atardecer se retrasa ligeramente, ofreciendo un respiro al crepúsculo. Cada amanecer llega un poco antes, pintando el cielo con tonos rosados y anaranjados con mayor premura. Esta transformación gradual, imperceptible a simple vista en sus primeros momentos, se va haciendo cada vez más evidente a medida que avanzan las semanas.

El aumento de las horas de luz no es homogéneo en todo el territorio español. La latitud geográfica influye significativamente: en el norte, la variación entre el día más corto y el más largo es más pronunciada que en el sur. Esta diferencia, aunque significativa para los habitantes de estas regiones, refleja la curvatura de la Tierra y la incidencia de los rayos solares.

Este progresivo alargamiento diurno nos acompaña a lo largo de la primavera, culminando con el solsticio de verano, aproximadamente el 20 o 21 de junio. En esta fecha, alcanzamos el día más largo del año, un hito que celebra la exuberancia de la naturaleza y la llegada del verano. Luego, el ciclo se invertirá, iniciándose el lento declive hacia el solsticio de invierno, cerrando el círculo de las estaciones y la constante danza entre la luz y la oscuridad. Pero hasta entonces, disfrutemos del triunfo de la luz, que desde el 21 de diciembre, avanza inexorablemente en España.