¿Cuánto es lo máximo que ha bajado el humano al mar?

El punto más profundo al que ha llegado el ser humano en el océano

Las profundidades del océano siempre han cautivado la imaginación humana. A medida que la tecnología avanza, nos hemos vuelto más audaces en nuestra exploración de este vasto y misterioso reino. Si bien aún quedan muchas áreas sin explorar, el ser humano ha logrado alcanzar las profundidades más extremas del océano.

La inmersión más profunda: Challenger Deep

El punto más profundo del océano es el Challenger Deep, ubicado en la Fosa de las Marianas en el Pacífico occidental. Su profundidad se estima en 10.911 metros (35.853 pies). Sólo dos personas han tenido el privilegio de llegar a este lugar extraordinario: Jacques Piccard y Don Walsh.

La histórica inmersión de 1960

El 23 de enero de 1960, Piccard y Walsh se embarcaron en su descenso de récord a bordo del batiscafo Trieste. El Trieste fue construido específicamente para soportar las presiones extremas de las profundidades del océano.

Durante su inmersión, Piccard y Walsh estuvieron expuestos a presiones de más de 1.000 veces la presión atmosférica al nivel del mar. El casco del Trieste se sometió a una fuerza equivalente al peso de 500 aviones de pasajeros Boeing 747.

Explorando el Challenger Deep

Después de un descenso de cuatro horas, el Trieste finalmente alcanzó el fondo del Challenger Deep. Piccard y Walsh permanecieron allí durante unos 20 minutos, tiempo durante el cual observaron una extraña criatura parecida a un lenguado y tomaron muestras de sedimentos y agua.

Su observación de una criatura viva en el punto más profundo del océano fue un testimonio de la extraordinaria capacidad de adaptación de la vida en la Tierra. También planteó preguntas sobre la posibilidad de que exista vida en otras partes del universo, incluso en entornos aparentemente inhóspitos.

Legado de la inmersión

La inmersión de Piccard y Walsh en el Challenger Deep fue un hito en la exploración humana. Demostró que los seres humanos son capaces de alcanzar las profundidades más extremas de nuestro planeta.

Su hazaña también inspiró a generaciones de científicos y exploradores a continuar nuestra búsqueda del conocimiento sobre las profundidades del océano. El Challenger Deep sigue siendo un símbolo de las capacidades humanas y un recordatorio de la vasta e inexplorada naturaleza de nuestro mundo.