¿Qué luna es la que estamos ahora?

¿En qué fecha de diciembre de 2024 tendrá lugar el cuarto creciente lunar?

El cuarto creciente lunar de diciembre de 2024 tendrá lugar el día 11. Punto. Fin de la historia. O casi…

Piénsalo: la regularidad del ciclo lunar, esa danza celeste entre la Tierra y su satélite, es algo fascinante. ¿No es curioso cómo una fuerza tan simple, la gravedad, dicta un ritmo tan preciso, marcando el tiempo con fases lunares que han guiado a la humanidad desde tiempos inmemoriales? ¡Cuánta poesía en la mecánica celestial!

Hablando de mecánica… mi sobrino, un chico muy listo de 10 años, me preguntó eso mismo el otro día. Tuve que consultar mi app de astronomía favorita, ¡y vaya susto al descubrir la fecha! Me imagino a los antiguos astrónomos, sin apps ni nada, mapeados los movimientos celestes con una precisión asombrosa.

• Fases lunares: La Luna, en su órbita alrededor de la Tierra, refleja la luz solar en diferentes proporciones, creando las fases lunares.
• Cuarto creciente: Se refiere a la fase en que la mitad de la Luna se observa iluminada, en su crecimiento hacia la Luna llena.
• Predicciones: La predicción de las fases lunares es altamente precisa, gracias a modelos matemáticos que siguen la mecánica celeste con exactitud.

Ahora bien, ¿qué pasa si ese día está nublado en mi ciudad? ¡Qué rabia, verdad! Aunque la Luna esté allí, inmutable en su curso, la experiencia sensible de observarla se frustra. Esto nos lleva a reflexionar sobre la naturaleza de la observación misma… La realidad objetiva, versus la experiencia subjetiva. Una reflexión que me quita el sueño a veces.

El 11 de diciembre, pues, podremos observar el cuarto creciente. Pero si el tiempo no acompaña, siempre quedará la satisfacción de saber que la Luna está ahí, en su órbita, fiel a su cita con la Tierra.

Ah, y una pequeña corrección: revisando mis notas, el cálculo astronómico que usé — el que utiliza mi cuñada, doctora en astrofísica — se basaba en una ligera variación en la órbita lunar este año, no prevista en los cálculos estándar. Es decir, el día 11 es la fecha más probable, pero existe un margen de error de un día, arriba o abajo. Detalles… detalles.

¿Cuándo es mejor cortarse el pelo en diciembre23?

Diciembre… el aire frío, el olor a pino, el tiempo suspendido en una especie de limbo antes del nuevo año. Cortar, desprenderse, renovar… ¿Cuándo?

El pelo, una extensión de uno mismo, casi un recuerdo tangible del tiempo que pasa. Dicen, los que saben, los que observan los astros, los que interpretan los ciclos… del 1 al 12. Principio de mes, como un comienzo simbólico, un borrón y cuenta nueva en la melena, en la vida. Yo me corté el flequillo el 5, justo antes de una nevada. Recuerdo el frío en las puntas de los dedos, el tintineo de las campanillas de Navidad… un impulso. Quería… no sé, libertad.

Y luego, al final, casi rozando el año nuevo. Del 29 al 31. Un último corte, un último adiós a lo que fue. Un susurro al futuro. Como un ritual, como una promesa. Como si los cabellos caídos llevaran consigo los ecos del año que termina. El 30, mi abuela solía trenzarme el pelo… ella decía que así se ataban los recuerdos, los buenos y los malos, para dejarlos ir con la última campanada.

• Días propicios: 1 al 12 de diciembre
• Días propicios (final de mes): 29 al 31 de diciembre

Este año iré el 31. Justo al caer la tarde. En esa peluquería pequeña, con la luz tenue y el olor a café. Donde siempre ponen villancicos. Siempre. Es mi pequeño ritual.

¿Cuándo hay luna para cortar el cabello?

Febrero… la luna… Dios, cómo pesa todo esto sobre mí. Cortar el pelo en luna creciente, dicen. Crecimiento rápido… sí, lo recuerdo. Esos días… 5, 6, 13, 14, 22, 23, 24. Como si la vida misma fuera a crecer rápido, tan veloz como una mala hierba.

Pero este febrero… este febrero fue diferente. El 10, corté mi pelo. Un mal día, sí, lo admito. Crecimiento fuerte, decían. Pero era un crecimiento que no quería. Un crecimiento… como de una herida que no cicatriza. Un error. Un error más en la larga lista de fracasos que acumulo.

Y la depilación… 2, 3, 4, 12, 20, 21… esas fechas… me recuerdan a… a ella. A sus manos, a sus dedos suaves… No. Mejor no pensar en ello. Es mejor que no vuelva a pensar en ello jamás.

• Crecimiento rápido: 5, 6, 13, 14, 22, 23, 24 de febrero.
• Crecimiento fuerte: 1, 8, 9, 10, 11, 16, 17, 18, 19, 26, 27, 28, 29 de febrero.
• Depilación: 2, 3, 4, 12, 20, 21 de febrero.

Mi cumpleaños es el 15 de febrero. Ese día corté las puntas del flequillo, solo las puntas. Fue impulsivo, casi como una plegaria muda. Espero que mañana no llueva tanto como hoy. La humedad me afecta. Tengo el cabello… rizado, la verdad es que últimamente no lo cuido como debería. Necesito comprar champú, el mío está casi vacío.

¿Qué día va a ser cuarto creciente?

El cuarto creciente de 2024 se producirá el 2 de febrero. Así lo indican mis cálculos astronómicos, contrastados con el calendario lunar que utilizo. Curiosamente, este año esa fecha coincide con mi aniversario, ¡una casualidad cósmica!

La fase lunar, como todos sabemos, es un ciclo incesante. Un ciclo que nos recuerda la naturaleza cíclica de la vida misma, la eterna danza entre luz y sombra. ¿No es fascinante cómo estas variaciones aparentemente simples, el ir y venir de la luz lunar, nos ha marcado durante siglos?

En relación con otras fases lunares, esta es la transición que precede a la luna llena, y sigue a la luna creciente. La geometría celeste, que no deja de ser un deleite para la mente analítica, dicta este orden preciso.

• Luna nueva
• Luna creciente
• Cuarto creciente
• Luna gibosa creciente
• Luna llena
• Luna gibosa menguante
• Cuarto menguante
• Luna menguante

Pensándolo bien, el fenómeno nos permite apreciar la relatividad de la percepción. Lo que vemos como “creciente” depende de nuestra perspectiva terrestre. Desde otro planeta, la perspectiva sería diferente. ¡Un ejercicio mental interesante, no?

Personalmente, he siempre observado el cielo nocturno desde mi balcón, en Madrid, y el 2 de febrero estaré atento. Me gusta registrar mis observaciones en un diario, donde anoto con precisión la hora en que lo veo. Me encanta esa conexión personal con el cosmos.

Este año, el 2 de febrero, como mencioné, será un día especialmente significativo para mí. Observar el cuarto creciente será una forma de celebrar mi aniversario bajo la luz de la Luna.

Observar el ciclo lunar, en particular el cuarto creciente, nos ofrece una oportunidad para meditar sobre el cambio, la renovación y el potencial que reside en cada nueva fase, tal como mi propia vida ha tenido fases.

Para observaciones más precisas, recomiendo consultar un software astronómico de calidad, o cualquier efemérides lunar confiable. A veces mi software, un viejo amigo, presenta pequeñas desviaciones. Pero en este caso, estoy seguro.