¿Qué nombre reciben las propiedades que dependen de la masa de la materia?

¿Cómo se llaman las propiedades de la materia que dependen de la masa?

¡Propiedades extensivas! Eso es, ¿no? Masa y volumen, claro. ¡Ay, qué cabeza la mía! Hoy he estado intentando montar la estantería de IKEA, ¡un desastre! Tornillos por todas partes… me recuerda a las moléculas, todas juntas, desordenadas… ¿o era el átomo? Ya no lo recuerdo bien…

Propiedades extensivas: dependen de la cantidad, ¿verdad? Como la masa de mi gato, que pesa 5 kilos. Si tuviera dos gatos iguales, 10 kilos. Fácil. El volumen de mi taza de café, 300 ml. Dos tazas? 600 ml. ¡Lógico!

¿Y las intensivas? ¡Ah, sí! Esas son las que… no dependen de la cantidad. La densidad del agua, por ejemplo, siempre es la misma, ¿o no? 1 g/ml. Aunque tenga un litro o una gota. La dureza del diamante… ¡eso sí que es intenso! Aunque sea un diamante pequeño o un pedazo enorme.

Espera… ¿qué más? ¡El punto de ebullición! El agua hierve a 100 grados Celsius, da igual la cantidad. Me encanta ese olor a café recién hecho. Recordando… mi vecina, María, me contó que… ¡Dios mío! Me estoy desviando.

• Propiedades extensivas: Masa, volumen, longitud, calor…
• Propiedades intensivas: Densidad, punto de ebullición, dureza, temperatura…

Tengo que terminar de montar esa estantería. ¡Necesito más café! ¿Será que la densidad del café influye en su sabor? ¡Qué cosas me pregunto!

Necesito apuntar todo esto para mi informe de química… ¡que lo tengo para mañana!

El enlace que pusiste me parece de una guía educativa de Jalisco. Me pregunto si utilizan ejemplos más interesantes allá.

¿Qué nombre reciben las propiedades de la materia?

Las propiedades… uff, a estas horas… todo se vuelve borroso. Propiedades generales, así las llaman, ¿no? Como si fueran algo… tan simple.

Pero… a veces pienso en el peso de mi guitarra, en cómo se siente la madera fría contra mis dedos a las tres de la mañana. Esas vibraciones… ¿son generales? ¿O es solo algo mío? Me siento tan vacío a veces… igual que el espacio entre las notas, ese silencio…

Y el volumen, que ocupa mi vieja mesa de noche. Tan poco espacio, y tantos recuerdos ahí. Fotografías descoloridas, una pluma rota, ese pendiente que perdí el año pasado en la playa de Málaga… recuerdos que pesan más que la madera, o el metal. Propiedades específicas, se dicen. Un nombre tan vacío como el resto.

A veces, me pregunto si todo eso realmente existe. Si la materia es solo una ilusión… ¿Qué importa el nombre entonces?

• Peso. Como el peso de la culpa.
• Volumen. El volumen del silencio en esta habitación.
• Masa. La masa de mis recuerdos… tantos, tantos…
• Inercia. La inercia de mi vida, a veces…

Sí… Propiedades generales… pero cada cosa… es única. Como el dolor… que también tiene sus propiedades… sus pesos, volúmenes, masas.

¿Qué depende de la cantidad de masa?

La densidad… depende de la masa.

• La masa define la cantidad de materia que hay. Y eso, eso lo cambia todo. Me acuerdo cuando era niño… intentaba levantar piedras enormes en la playa. Nunca podía.

• Luego está el volumen… pero sin masa, no hay densidad.

• Es como mi abuelo… siempre decía que el valor de una persona está en lo que da, no en el espacio que ocupa. Algo así. Aunque él no hablaba de física, claro. Él prefería el dominó.

• La densidad une masa y volumen, y crea un valor único para cada material. Como cada uno de nosotros.

¿Qué depende de la cantidad de materia?

¡Ey! ¿Qué pasa? Me preguntabas lo de la materia, ¿no? Pues mira, la masa y el volumen, esas sí que dependen de la cantidad de materia que tengas. O sea, si tienes más materia, más masa y más volumen, ¡es obvio! Es como con los churros, ¿sabes? Cuanto más churros, más pesan y ocupan más sitio en la caja.

Pero luego están las otras, las propiedades intensivas, que es laaaarga historia… Esas son como la temperatura, o la densidad. No importa cuánta materia tengas, la temperatura, por ejemplo, es la misma en un vaso de agua o en una piscina, ¿entiendes? Es igual de fría, en principio. Bueno, igual no… si la piscina está al sol, puede ser distinto jeje.

Ya, ya sé, es un lío, pero piensa en esto:

• Propiedades extensivas: Dependen de la cantidad de materia. Masa, volumen, ¡ya te lo dije! También la longitud de una barra de acero, claro.
• Propiedades intensivas: Ni de coña dependen de la cantidad. Densidad, temperatura, punto de ebullición… ¡qué pesados son estos conceptos, eh!

Te cuento que el otro día en mi clase de física, estaba flipando con lo de la densidad. La densidad del agua es 1 g/ml, pero la de el oro es muchísima más alta; 19,3 g/ml ! Me acuerdo que me pareció súper interesante.

Ah, y otra cosa que me dijeron, que algunas propiedades pueden depender en parte de otras, a veces es un poco complejo eso de la materia, ¿verdad? Es un poco rollo.

En resumen: Masa y volumen dependen de la cantidad de materia; densidad y temperatura, no. ¡Facilísimo! Bueno, casi.

¿Qué propiedad de la materia depende de la cantidad de materia?

¡Ay, qué bueno verte! ¿Qué tal todo? Me preguntabas sobre la propiedad de la materia que depende de la cantidad, ¿no? A ver si me acuerdo bien…

Esas son las propiedades extensivas, ¡exacto! O sea, que cuanto más tengas de algo, más grande es esa propiedad. Son como… aditivas, eso, como que se suman.

Pero bueno, ya que estamos, te cuento un poco más que me sé, aunque no sé si te interesa mucho la verdad. Es que esto me recuerda a cuando estaba en el instituto, uf, ¡qué pereza me daba la química! Pero algo se me quedó grabado, supongo.

• Masa: Obvio, ¿no? Más materia, más masa. Este año compré 5 kilos de naranjas en vez de 3, ¡y pesan más, lógicamente!
• Volumen: Igual. Si llenas una piscina pequeña, tienes menos volumen de agua que si llenas una olímpica. El volumen es importante.
• Peso: Cuanto más masa, más pesa. Si subo a mi perro (que pesa unos 30kg) en brazos, notaré más peso que si subo a mi gato (que pesa como 5kg). Es evidente.
• Energía: Un poquito más complicado, pero a más materia, más energía puede tener, por ejemplo, la energía calorífica. Si caliento una olla pequeña de agua, tardo menos que si caliento una olla gigante.

Ojo, que luego están las propiedades intensivas, que no dependen de la cantidad. Por ejemplo, el color, la densidad, la temperatura… Da igual si tienes un litro o un millón de litros de agua, ¡sigue siendo agua! La densidad del agua no cambia solo porque tengas más. ¿Me explico? Espero que sí, porque me estoy enrollando ya…

¿Qué depende de la cantidad de materia presente?

Aquí va, en la oscuridad, como si lo pensara en voz alta…

La masa. Depende. De cuánta… sí, de cuánta materia hay.

• Es raro pensarlo así, tan simple. Como si el peso que siento… fuera solo eso.
• Me acuerdo de mi abuela. Decía que las cosas importantes son así, sencillas.
• Ella ya no está. Era… mucha masa, mucha presencia.

Cuanto más hay, más pesa. Supongo.

• A veces siento que tengo demasiada masa, demasiadas cosas dentro.
• Demasiados recuerdos de 2023, que me pesan, que no me dejan moverme.
• Como si la tristeza fuera materia oscura, que no se ve pero te hunde.

Es una ecuación estúpida y cruel.

• Pero… la vida es eso, ¿no? Sumar, restar. Materia que entra y sale.
• Ojalá pudiera deshacerme de alguna masa. De este dolor en el pecho.
• Pero supongo que entonces… ya no sería yo.

¿Qué propiedades no dependen de la cantidad de materia?

¡Ay, qué lío! Propiedades intensivas… ¿verdad? Me estoy volviendo loca con esto.

Densidad, sí, eso es una, ¡claro! La densidad del agua es siempre la misma, ¿no? Aunque tengas un litro o un vaso, sigue siendo la misma densidad. ¿Es eso?

¡Y la temperatura! El punto de ebullición del agua, 100 grados, da igual la cantidad. Aunque tengas un charco o una piscina. Me pregunto… ¿y el color? ¿El color de una sustancia es intensivo o no? ¿Qué pasa con el olor? ¡Menos mal que tengo mi libreta apuntado todo esto!

Propiedades intensivas: No dependen de la masa. ¿Fácil, no? A ver…

• Densidad.
• Temperatura.
• Punto de ebullición.
• Color.
• Olor.

¡Uf! Necesito café. Este tema es denso… igual que la densidad del mercurio, que tengo apuntada en mis notas del 2024. ¡Qué pesado! Pero bueno, al menos ya lo tengo más o menos claro.

¿Magnitud? ¿Qué era eso? ¡Ah, sí! Algo que se puede medir. Claro, como la masa, que es extensiva. ¡Que no se me olvide! Hoy he ido al laboratorio y he medido la densidad de varias sustancias, ¡menudo lío! Al final lo he conseguido, aunque mi bata está hecha un desastre.

Magnitudes intensivas. ¡Toma ya! Qué bien suena, ¿no? Y luego están las otras… ¡las extensivas! Pero eso ya es otra historia. Mañana más.