¿Qué produce el lado oscuro de la luna?

El lado oscuro de la Luna: desmitificando la oscuridad

Contrariamente a la creencia popular, el “lado oscuro” de la Luna no es inherentemente oscuro. En realidad, es el hemisferio que permanece oculto a la vista desde la Tierra. Sin embargo, este lado de la Luna tiene características únicas y fascinantes.

La sombra de la Tierra

El lado oscuro de la Luna no es oscuro por sí mismo, sino que está en constante sombra de la Tierra. Esto ocurre porque la Luna está ligada por las mareas a la Tierra, lo que significa que siempre presenta la misma cara hacia nosotros. Como resultado, la otra mitad de la Luna nunca es visible desde la Tierra.

Dispersión atmosférica

Aunque el lado oscuro está en sombra, no está completamente oscuro. La atmósfera de la Tierra dispersa la luz solar, que se desvía hacia las zonas oscuras de la Luna. Esta luz dispersada le da al lado oscuro un tenue brillo rojizo, que es más pronunciado durante las lunas llenas.

Características únicas

A pesar de su oscuridad, el lado oscuro de la Luna alberga algunas características únicas que lo distinguen del lado visible:

• Cráteres más grandes: El lado oscuro tiene una concentración más alta de cráteres grandes, ya que está menos protegido de los impactos de meteoritos y asteroides.
• Menos mares: La superficie del lado oscuro está dominada por tierras altas, con menos mares (llanuras oscuras) que el lado visible.
• Composición diferente: El lado oscuro tiene una composición diferente al lado visible, con mayores concentraciones de elementos como el titanio y el uranio.

Exploración del lado oscuro

El lado oscuro de la Luna ha sido explorado por varias misiones espaciales, incluida la misión “Luna 3” de la Unión Soviética en 1959, que obtuvo las primeras imágenes de este hemisferio. Más recientemente, en 2018, la sonda “Chang’e 4” de China se convirtió en la primera nave espacial en aterrizar en el lado oscuro, proporcionando datos valiosos sobre su superficie y composición.

Conclusión

El lado oscuro de la Luna no es tan oscuro como su apodo sugiere. Es un hemisferio único y fascinante que ha sido en gran medida inexplorado. Con el avance continuo de la tecnología espacial, podemos esperar aprender más sobre esta parte oculta de nuestro vecino celestial en el futuro.