¿Qué pasa si no pongo filtro de aire a mi carro?

¿Qué pasa si no le pongo filtro de aire a mi carro? ¡Uf! Mala idea, de verdad. Es como si yo intentara correr una maratón respirando solo por una pajita… ¿Te imaginas? Imposible. Pues al motor le pasa algo parecido.

Sin ese filtro, imagínate todo el polvo, la tierra, los bichitos… ¡todo eso va directo al motor! ¿Y qué crees que pasa? Pues un desastre. Se forma una pasta rara, como un lodo, que se pega por todos lados. Recuerdo una vez que a mi tío le pasó, ¡menudo lío! El coche empezó a dar tirones, como si estuviera tosiendo. Y claro, gastaba gasolina como un loco. ¿Para qué? Para andar a trompicones.

Dicen que se forma una mezcla “pobre” de aire y combustible. Suena fatal, ¿no? Como una comida desabrida. Y el coche, pues igual, sin fuerza. A mí me pasó algo similar con una moto que tenía, aunque no era por el filtro, sino por otra cosa. Pero la sensación de impotencia al acelerar y que no responda… es horrible.

Además, esa mugre puede llegar a taponar cosas importantes, y entonces sí que la liamos. He leído por ahí que se pueden acumular sedimentos, y que incluso se puede encender la lucecita del “Check Engine”. Vamos, un dolor de cabeza. ¿Y para qué? Si un filtro nuevo no cuesta tanto…

En serio, cambiar el filtro del aire es como darle un respiro al coche. Como cuando tú abres la ventana en una habitación cargada. Aire fresco, limpio… El motor lo agradece, y tu bolsillo también, porque al final, un motor sucio gasta más. Piénsalo, ¿vale la pena arriesgarse por ahorrarse unos pocos pesos? Yo creo que no.