¿Qué pasa si tomo agua con cloro hervida?

El Peligro Oculto: ¿Qué Ocurre si Ingerimos Agua con Cloro Hervida?

La preocupación por la calidad del agua que consumimos es, afortunadamente, cada vez mayor. En la búsqueda de agua segura, a menudo recurrimos a métodos como hervir para eliminar posibles patógenos. Sin embargo, ¿qué sucede cuando el agua que vamos a hervir contiene cloro? La respuesta, lejos de ser tranquilizadora, nos revela un peligro invisible pero real.

Si bien el cloro se utiliza comúnmente para desinfectar el agua y eliminar bacterias, su interacción con el calor genera una transformación química con consecuencias perjudiciales para nuestra salud. Al hervir agua clorada, se crean subproductos de desinfección (SPD), entre los que destacan los trihalometanos (THM) y los ácidos haloacéticos (HAA). Estos compuestos no solo alteran el sabor y olor del agua, sino que representan un riesgo significativo para nuestra salud.

El verdadero peligro: la formación de subproductos tóxicos

El cloro, al ser sometido a altas temperaturas, reacciona con la materia orgánica presente en el agua (incluso en pequeñas cantidades) para formar los ya mencionados SPD. Estos subproductos son considerablemente más tóxicos que el cloro en sí mismo. La ingestión de agua con estos SPD puede provocar:

• Irritación y quemaduras en el tracto digestivo y respiratorio: Los SPD pueden causar quemaduras en la boca, garganta, esófago y estómago. La inhalación de los vapores generados durante la ebullición también puede irritar las vías respiratorias.
• Daño a los tejidos: La exposición continua o la ingestión en grandes cantidades pueden dañar las células y tejidos del organismo, especialmente el hígado y los riñones.
• Riesgo de cáncer: Diversos estudios han relacionado la exposición prolongada a THM y HAA con un mayor riesgo de desarrollar ciertos tipos de cáncer, como el cáncer de vejiga y el cáncer de colon.
• Problemas neurológicos: En algunos casos, la exposición a altas concentraciones de SPD puede desencadenar problemas neurológicos como dolores de cabeza, mareos, e incluso convulsiones.
• Problemas reproductivos: Algunas investigaciones sugieren que la exposición a THM durante el embarazo podría estar asociada a un mayor riesgo de aborto espontáneo y bajo peso al nacer.

¿Qué podemos hacer para evitar el riesgo?

La buena noticia es que existen medidas preventivas para evitar los peligros de beber agua con cloro hervida:

• Dejar reposar el agua: Antes de hervir el agua clorada, déjala reposar durante al menos 30 minutos. Esto permite que parte del cloro se evapore de forma natural.
• Utilizar un filtro de carbón activado: Los filtros de carbón activado son muy eficaces para eliminar el cloro y otros contaminantes del agua.
• Hervir en un lugar ventilado: Si decides hervir agua clorada, asegúrate de hacerlo en un lugar bien ventilado para evitar la inhalación de los vapores tóxicos.
• Considerar otras opciones: Si la calidad del agua de tu grifo es cuestionable, considera utilizar agua embotellada o invertir en un sistema de purificación de agua más avanzado.
• Priorizar el agua purificada antes de hervir: Si tienes acceso a agua purificada, ya sea por filtración o embotellada, utilízala para hervir en lugar de agua clorada del grifo.

En resumen, aunque hervir agua es una práctica común para eliminar bacterias y microorganismos dañinos, es crucial ser conscientes de los riesgos asociados a la presencia de cloro. Tomar precauciones sencillas y priorizar la calidad del agua que consumimos nos ayudará a proteger nuestra salud y la de nuestra familia. No subestimes el peligro invisible que puede ocultarse en una acción tan cotidiana como hervir agua. La prevención es la clave para evitar consecuencias graves.