¿Cómo puedo recuperar la energía después de una gastroenteritis?

Uf, ¿gastroenteritis? Sé perfectamente cómo te sientes. Esa sensación de vacío, de que te han pasado por encima con un tractor… ¿Quién lo diría, verdad? Tan pequeño el virus y tan grande el destrozo. Recuerdo una vez, volviendo de un viaje a México… bueno, mejor no entro en detalles, ¡pero digamos que el tequila no tuvo la culpa! Lo que sí recuerdo es la debilidad, el mareo… horrible. Como si te hubieran robado toda la energía. Y lo único que quieres es recuperar algo de vida, ¿no?

La manzana asada y el plátano… ¡qué gran idea! De verdad. A mí me salva la vida cuando estoy así. Sobre todo el plátano, no sé, me reconforta. ¿Será el potasio? Algo leí una vez sobre que ayuda con los electrolitos… pero vamos, ni idea, lo que sí sé es que funciona. Y la manzana asada, calentita… es como un abrazo para el estómago. A veces le pongo un poquito de canela, ¿sabes? Le da un toque… mmmm…

Ese puré que mencionan, con un poquito de miel… ¡pura magia! Aunque yo, a veces, si estoy muy floja, ni siquiera lo trituro. Simplemente aplasto el plátano con un tenedor y la manzana la como a trocitos pequeños. Lo importante es que sea fácil de digerir, ¿no? Que no le des más trabajo al pobre estómago, que bastante tiene.

Ah, y otra cosa que me ayuda mucho es el agua de arroz. Sí, sí, como suena. No es lo más rico del mundo, pero rehidrata que da gusto. Mi abuela siempre decía que era mano de santo, y tenía razón. Quizás no te apetezca mucho al principio, pero créeme, te va a venir genial. Pequeños sorbos, poco a poco, y verás cómo vas volviendo a la vida. ¡Ánimo! Que esto pasa, ya lo verás.