¿Cómo se debe tomar la sal de mar?

Uso moderado de la sal marina: Clave para los beneficios para la salud

La sal marina, obtenida del agua de mar evaporada, ha ganado popularidad como una alternativa más saludable a la sal de mesa común. Si bien contiene pequeñas cantidades de minerales beneficiosos como el magnesio y el potasio, es crucial consumirla con moderación para aprovechar sus posibles beneficios para la salud.

Beneficios potenciales de la sal marina

Consumir cantidades moderadas de sal marina se ha relacionado con los siguientes beneficios potenciales:

• Control del colesterol: El magnesio presente en la sal marina puede ayudar a reducir los niveles de colesterol LDL (el “malo”) en la sangre.
• Regulación de la presión arterial: El potasio en la sal marina puede ayudar a contrarrestar los efectos del sodio, que pueden aumentar la presión arterial. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la sal marina también contiene sodio, por lo que su consumo debe ser moderado.

Consumo recomendado

Para obtener los posibles beneficios de la sal marina mientras se minimizan los riesgos potenciales, es esencial consumirla con moderación. La Asociación Estadounidense del Corazón recomienda no más de 2.300 miligramos (mg) de sodio por día, que equivale aproximadamente a una cucharadita de sal. Esto incluye todo el sodio de los alimentos, bebidas y condimentos.

Método de consumo

Una forma de consumir sal marina es disolver media cucharadita en un vaso de agua tibia. Esto ayuda a mejorar la absorción de los minerales beneficiosos. También se puede utilizar como sustituto de la sal de mesa en recetas y durante la cocción.

Precauciones

Si bien la sal marina puede ofrecer algunos beneficios para la salud en pequeñas cantidades, es importante tener en cuenta las siguientes precauciones:

• Personas con presión arterial alta: Incluso aquellos con presión arterial alta deben limitar su consumo de sal, incluida la sal marina.
• Problemas renales: El exceso de sal puede ejercer presión sobre los riñones, lo que se desaconseja para las personas con problemas renales.
• Embarazo: Las mujeres embarazadas deben limitar su consumo de sal para evitar la retención de líquidos y otros problemas.

Conclusión

La sal marina, en pequeñas cantidades, puede contribuir a controlar el colesterol y la presión arterial. Disolver media cucharadita en agua tibia es una forma efectiva de consumo. Sin embargo, es esencial recordar que el consumo debe ser moderado, incluso para las personas con presión arterial alta, para evitar posibles efectos adversos. Siempre es aconsejable consultar con un profesional de la salud antes de realizar cambios significativos en la dieta que incluyan un mayor consumo de sal.