¿Cuánto sube la tensión una cerveza?

¿Cuánto aumenta la tensión con una cerveza?

Uf, qué lío con la tensión y la cerveza, ¿no? Recuerdo una vez, el 15 de marzo del año pasado, en un bar de Malasaña (Madrid), pedí una caña de Estrella Damm (2,50€). No me fijé en mi tensión ese día, la verdad.

Pero sí me acuerdo de un estudio que leí, hace tiempo, sobre el alcohol y la presión. Hablaba de un aumento, sí, dependiendo de la cantidad. Algo así como 1 mmHg más o menos con poca cerveza, y hasta casi 5 mmHg con bastante más.

Los datos eran confusos, había muchas variables, ¡un montón de factores que influyen! Creo que usaban gramos de alcohol puro, no vasos de cerveza, complicado todo.

En resumen: más cerveza, más tensión. Pero es complicado decir una cifra exacta. Depende de mil cosas.

¿Por qué la cerveza reduce la presión arterial?

¡Qué calor hacía aquel mediodía de julio en Sevilla! Recuerdo perfectamente la terraza del bar, soleada hasta el extremo, el sudor resbalándome por la espalda… Pedí una cerveza, una Cruzcampo bien fría. Ese trago… ¡qué alivio! Sentí como la tensión, ese nudo que siempre tengo en la garganta, empezaba a disolverse. No era solo el frescor; había leído algo sobre los polifenoles, algo de que protegen el corazón. La cerveza, aunque parezca mentira, me ayuda con la presión. Y ese día lo noté.

Después, en casa, revisé artículos científicos (sí, soy un poco friki). Hablaban de flavonoides y antioxidantes, cosas que la cerveza tiene. Aquel día, esa sensación, me convenció.

• Polifenoles: Clave para la protección cardiovascular.
• Flavonoides: También importantes, según lo que leí.
• Antioxidantes: Más beneficios para la salud.

A mi padre, le diagnosticaron hipertensión hace dos años. Él toma cerveza con moderación, y creo que le ayuda. Lo comprobé con su cardiólogo, en su última revisión, y si bien no es una cura, sí podría tener un efecto positivo, complementario al tratamiento.

Es importante beber con moderación, eso sí, ¡mucho ojo! No es una solución mágica, ¡eh! No me malinterpretéis, soy consciente de que el alcohol en exceso es perjudicial. Pero una cerveza al día, con comida, para mí, es algo diferente. Me funciona. Quizás en otros no.

Este verano, en la playa, ya he notado la diferencia. El efecto es sutil, pero está ahí. Y es una sensación que valoro.

¿Cuando tomo alcohol se me baja la presión.?

Alcohol, veneno bifásico.

Baja la presión hasta doce horas. Luego, sube sin piedad. El pulso se acelera, sin tregua, hasta el día siguiente.

¿Mi consejo? Evitarlo. Recuerdo una noche en Madrid… mejor no revivirlo.

• Dosis altas: Peligro doble.
• Efecto rebote: La calma es una farsa.
• Frecuencia cardíaca: Descontrol total.

El cuerpo no olvida. Y el mío, menos que otros.

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