¿Cuántos minerales necesita el cuerpo al día?

¿Cuántos minerales esenciales requiere el cuerpo humano diariamente?

Recuerdo una vez, creo que fue en marzo del 2022, comprando suplementos en una farmacia cerca de mi casa en Lavapiés, Madrid. Me quedé mirando la cantidad de minerales que contenían, y me entró la duda de cuántos necesitamos realmente. Me puse a investigar un poco, y me sorprendió descubrir que son alrededor de 20. Me parecía muchisimo, ¿cómo podía necesitar tantas “piedras” mi cuerpo?

La verdad es que no soy experta en nutrición, ni mucho menos. Pero sí que me interesa el tema, sobre todo desde que empecé a ir al gimnasio, allá por octubre de 2021. Me di cuenta de que la alimentación era fundamental, no solo para el rendimiento, sino también para la salud en general. Y claro, los minerales juegan un papel importante.

Lo que aprendí en mi pequeña investigación es que no todos los minerales se necesitan en la misma cantidad. Algunos, como el calcio o el fósforo, los requerimos en cantidades mayores (macrominerales). Otros, como el hierro o el zinc, solo los necesitamos en pequeñas dosis (oligoelementos o microminerales). De todas formas, me sigue impresionando la cantidad.

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¿Cuántos minerales esenciales requiere el cuerpo humano diariamente?

Aproximadamente 20. Se clasifican en macrominerales (necesarios en mayor cantidad) y microminerales u oligoelementos (necesarios en menor cantidad).

¿Cuántos minerales necesita tu cuerpo?

Nuestro cuerpo requiere una variedad de minerales para funcionar correctamente. Se distinguen dos categorías principales según la cantidad necesaria:

• Macrominerales: Necesarios en cantidades relativamente grandes. Incluyen calcio, fósforo, magnesio, azufre, potasio, sodio y cloro. El calcio, por ejemplo, no solo fortalece huesos, también es crucial para la contracción muscular y la transmisión nerviosa. El potasio, por su parte, regula el equilibrio de líquidos y la presión arterial.
• Oligoelementos: Requeridos en cantidades muy pequeñas (generalmente menos de 100 mg diarios). Aquí encontramos hierro, yodo, zinc, flúor, selenio, cobre, cromo, manganeso y molibdeno. El hierro es vital para el transporte de oxígeno en la sangre, mientras que el zinc juega un papel importante en el sistema inmunitario y la cicatrización de heridas.

La deficiencia de un solo mineral puede desencadenar una cascada de problemas de salud. Pienso en el yodo, esencial para la función tiroidea. ¿Cuántas veces he visto problemas relacionados con la tiroides por dietas restrictivas?

No se trata solo de cantidad, sino de biodisponibilidad. Algunos minerales se absorben mejor que otros, dependiendo de la fuente y la presencia de otros nutrientes. El hierro, por ejemplo, se absorbe mejor cuando se consume con vitamina C.

La clave es una dieta equilibrada y variada. No soy fanático de los suplementos a menos que haya una deficiencia demostrada. Prefiero obtener mis nutrientes de alimentos integrales. Por eso siempre digo que es mejor una naranja que una pastilla. ¿No crees?

¿Cuáles son 7 alimentos ricos en minerales?

¡Anda ya! ¿Minerales? ¡Como si fuera a hacer una tesis doctoral sobre el tema! Vamos al grano, que tengo cosas mejores que hacer que enumerar minerales. ¡Qué pereza!

Siete alimentos con minerales, ¡a ver si te sirve esta chapuza!:

• Frutos secos: ¡Madre mía, la cantidad de minerales que tienen! Como si fueran pequeñas minas de oro… ¡pero comestibles! Eso sí, con moderación, eh, que no quiero acabar como una ardilla obesa.

• Semillas: ¡Otro festín mineral! Chía, lino, sésamo… ¡hasta mi abuela se hace batidos con eso! Aunque ella le echa miel hasta arriba, la pobre, ¡no sabe lo que son los minerales!

• Legumbres: ¡Lentejas, garbanzos, judías!… ¡Un ejército de minerales! Recuerdo cuando mi tía Emilia me obligaba a comerlas. ¡Qué tiempos aquellos, que tragedia!

• Sardinas: ¡Pescado azul, rey de los minerales! Aunque me recuerdan a mis vacaciones de 2023 en la costa, comiendo sardinas asadas con mis amigos, ¡qué asco de sardinas asadas! De verdad, no me gustaron.

• Marisco: ¡Langostinos, gambas, mejillones! Si no me equivoco, ¡un festín para tus huesos (y tus riñones)! ¡Eso sí, si tienes la pasta para ello!

• Verduras de hoja verde oscuro: Espinacas, acelgas… ¡hasta me recuerda a Popeye! Aunque, sinceramente, prefiero un buen chuletón. Ya me contarás lo que piensas sobre el sabor de las acelgas.

• Lácteos: Leche, yogur, queso… ¡minerales a cascoporro! Eso sí, con moderación. No vaya a ser que te conviertas en una vaca humana.

¡Y ya está! ¡Ah!, se me olvidaba… Huevos, también son ricos en minerales. ¡Casi me da un infarto! ¡Cómo se me olvidó esa maravilla de la naturaleza! Lo siento, me he despistado. ¡Hasta mañana!

#Cuerpo #Minerales #Necesidades