¿Qué fruta es buena para regenerar los riñones?

¿Qué no puede comer una persona que sufre de los riñones?

La dieta para riñones sanos es fundamental. Una persona con problemas renales debe restringir ciertos alimentos para evitar sobrecargar sus órganos ya debilitados. En mi caso, tras un chequeo médico en 2024, mi nefrólogo me recalcó la importancia de esta dieta.

• Sodio: ¡Menos sal! Es clave, debido a la dificultad renal para regular el balance hídrico y la presión sanguínea. Aquí sí que es menos, ¡mucho menos! Reducir el sodio es fundamental para evitar la hipertensión, un enemigo común de los riñones.

• Fósforo: Presente en lácteos, bebidas gaseosas y embutidos, su exceso dificulta el trabajo renal. Un control estricto es esencial, no es una cuestión trivial. Yo, por ejemplo, evito por completo el queso cheddar.

• Potasio: Frutas como plátanos, naranjas y papas contienen potasio, que en exceso puede ser dañino. Debe controlarse, aunque depende mucho del estado de cada paciente. Mi nutricionista me ha hecho un plan personalizado al respecto.

• Proteínas: La ingesta proteica debe ser moderada. La sobrecarga de trabajo para los riñones a la hora de metabolizarlas puede ser perjudicial. Más bien proteínas de alta calidad; es mejor priorizar el pescado, pollo, que las carnes rojas. ¡Cuidado con los excesos!

• Otros: Limitar alimentos procesados, azúcares refinados y bebidas azucaradas es crucial para la salud renal a largo plazo. Estas decisiones pueden afectar tu bienestar a largo plazo, así que hay que tomárselo en serio. Se debe evaluar cada caso individualmente para un tratamiento personalizado.

La restricción de estos alimentos no es un capricho, sino una medida de protección para la función renal. La enfermedad renal crónica avanza lentamente y a menudo asintomáticamente, la prevención y el control son vitales. Pensar en ello como una inversión en calidad de vida, y no como una imposición, facilita la adherencia a la dieta.

Reflexión: La salud, como la vida, es un delicado equilibrio. El cuerpo es un sistema complejo, y la armonía entre sus partes es esencial para el bienestar. Las restricciones dietéticas, aunque a veces puedan parecer limitantes, son parte de ese equilibrio, permitiendo que los riñones cumplan su función vital.

Se podría ampliar con detalles sobre el tipo de proteínas recomendadas, la forma de sustituir ciertos alimentos, etc.

¿Cómo recuperar la función de los riñones?

Aquí va, en la oscuridad…

¿Cómo recuperar la función de los riñones?

• Elige alimentos saludables.
• Actividad física regular.
• Mantén un peso adecuado.
• Duerme lo suficiente.
• No fumes.
• Reduce el alcohol.
• Maneja el estrés.

Lo sé, suena a cliché, ¿verdad? Como si fuera fácil.

Pero es que la verdad, a veces la vida es así de simple… y así de jodidamente difícil.

No sé… últimamente me siento como si mis propios riñones estuvieran fallando, no físicamente, supongo. Mas bien, como si estuvieran filtrando toda la alegría, dejando solo un residuo amargo.

• Recuerdo cuando corría kilómetros sin cansarme. Ahora me ahogo subiendo las escaleras.
• O cuando podía beber cerveza con mis amigos hasta el amanecer. Ahora, una copa de vino me da dolor de cabeza.
• Antes podía dormir a pierna suelta. Ahora solo doy vueltas en la cama.

Y el estrés… ah, el estrés. Ese veneno silencioso que corroe todo por dentro.

¿Reducir el estrés? ¿Cómo, si el estrés es mi sombra, mi fiel compañero?

Es fácil decirlo. Pero hacer… eso es otra historia.

¿Qué es bueno comer y beber para los riñones?

¡Ay, amigo! Los riñones, ¿verdad? Un tema serio. Mucha agua, eso sí, súper importante. No te olvides, eh. Como ocho vasos al día, mínimo. Mi médico me lo dijo.

Frutas, las de siempre, pero sin azúcar añadida, ojo. Fresas, arándanos, esas cosas ricas. Un puñado cada día, que no falten. Uvas también, me encantan! Aunque a veces me paso, lo reconozco. Manzanas, de esas verdes, qué ricas están.

Verduras, todas las que puedas, pero ¡sin pasarte con la sal! Coliflor al vapor, ¡delicioso! O cebolla, aunque a veces me da un poco de acidez estomacal. Berenjena, ¡qué buena está en las pizzas! Y nabo, sí, aunque no es mi favorito.

Proteínas, poca grasa, es fundamental. Pollo a la plancha, pescado al horno… Huevos, sí, pero con moderación. Mariscos, ¡me encantan los camarones! Pero sin sal, ¡eh!, ya te dije. ¡Mira que soy despistado!

• Agua (mucho)
• Frutas (bajas en azúcar)
• Verduras (sin mucha sal)
• Proteínas magras (pollo, pescado)

Y te cuento, yo también tengo problemas con la diabetes, y esto es lo que como, ¡y me va genial! A veces meto alguna que otra chuchería, ¡qué le vamos a hacer! Pero procuro controlarme. El otro día me hice un análisis de sangre y el médico me dijo que las cosas iban bien, ¡menos mal! Este año me he hecho como tres analíticas, ¡así que estoy al día! Pero bueno, esto es lo que yo como, no soy médico, ¿eh? ¡Consulta con el tuyo para que te diga lo que mejor te conviene! No me hago responsable si te sale mal. Jaja, ¡es broma!

¿Cómo recuperar los riñones dañados?

Regenerar riñones, utopía hoy. No hay vuelta atrás total.

Pero se pelea la batalla:

• Presión y glucosa, a raya o la muerte te espera. Esencial.
• Comida de asceta: sodio, potasio, fósforo, el nuevo dogma.
• Fármacos: el veneno correcto cura.
• Nefrotóxicos, ni probarlos: contrastes, ciertos “remedios”, sepulcros blanqueados.

Investigación avanza, sí. ¿Milagro? Años luz. La cura real, un espejismo. Mi abuelo murió por esto, la medicina le falló. No confío.

¿Qué es bueno para que vuelvan a funcionar los riñones?

¡Ey, amigo! ¿Los riñones, eh? Complicado, pero te cuento lo que sé, a ver si te sirve. Comida sana, es la clave. ¡Olvídate de la bollería industrial, ya sabes!

Menos sal, ¡mucho menos! No más de 2300 miligramos de sodio al día, eso es, como, una pizca en cada cosa. Recuerda eso que te conté de mi tía, que tenía los riñones fatal, y el médico le dijo lo mismo. El azúcar, ni te cuento. Menos del 10% de calorías de azúcares añadidos, imagínate, ¡qué locura! Es casi imposible, pero bueno, lo ideal es eso.

Alimentos buenos, buenos… Mira, frutas, verduras, legumbres… ¡cosas así! Ayer mismo me comí un montón de lentejas, ¡buenísimas! Mi abuela siempre dice eso, que las lentejas son “oro en grano” para la salud. Y, sobre todo, ¡mucha agua! Mucha agua, ¡agua, agua, agua! Eso sí que es fundamental.

• Frutas y verduras de temporada, un montón.
• Legumbres, lentejas, alubias… ¡que me encantan!
• Agua, ¡a litros! Como mínimo dos litros diarios.
• Menos sal, ¡mucho menos!
• Azúcar añadido, ¡casi nada!

Este año mi médico, el Dr. Pérez, me dijo que vigile el potasio también. Demasiado potasio puede ser malo para los riñones, así que con moderación en plátanos, tomates y patatas. Ya sabes, todo con cabeza. Y si ves algo raro, al médico corriendo, eh. ¡Cuídate!