¿Qué pasa si como productos con exceso de sodio?

El impacto del consumo excesivo de sodio en el cuerpo

La ingesta excesiva de sodio es un problema de salud pública importante que conlleva una serie de consecuencias negativas para el cuerpo. Cuando se consume en cantidades excesivas, el sodio puede provocar:

Retención de líquidos

El sodio es un electrolito que ayuda a regular el balance de líquidos en el cuerpo. Cuando se consume demasiado sodio, atrae agua a los tejidos, lo que provoca hinchazón, especialmente en las manos, los pies y los tobillos.

Aumento de peso

La retención de líquidos asociada con el consumo excesivo de sodio puede conducir a un aumento de peso temporal. Sin embargo, este peso no es grasa, sino más bien el resultado del exceso de agua en el cuerpo.

Sobrecarga de órganos

El exceso de sodio puede sobrecargar los órganos responsables de procesar y eliminar los desechos, como el hígado, los riñones y el corazón. El hígado ayuda a metabolizar el sodio, mientras que los riñones ayudan a excretarlo a través de la orina. El corazón bombea sangre más difícilmente con niveles altos de sodio, lo que puede provocar un aumento de la presión arterial y problemas cardíacos.

Otros efectos negativos

Además de los efectos mencionados anteriormente, el consumo excesivo de sodio también puede contribuir a:

• Aumento de la sed
• Dolores de cabeza
• Fatiga
• Náuseas
• Vómitos

Recomendaciones

Para evitar los efectos nocivos del consumo excesivo de sodio, se recomienda limitar la ingesta diaria de sodio a:

• 2.300 miligramos (mg) para adultos en general
• 1.500 mg para adultos con presión arterial alta o enfermedad renal

Se deben evitar los alimentos procesados y envasados, que suelen ser altos en sodio. En su lugar, se deben preferir los alimentos frescos y poco procesados, como frutas, verduras, cereales integrales y proteínas magras.

Conclusión

El consumo excesivo de sodio puede tener una variedad de efectos negativos en el cuerpo, que incluyen retención de líquidos, aumento de peso y sobrecarga de órganos. Al limitar la ingesta de sodio y optar por una dieta saludable, podemos proteger nuestra salud y bienestar general.