¿Qué pasa si me como 5 huevos cocidos al día?

Vale, a ver, ¿cinco huevos cocidos al día? Uf, ya me estoy imaginando el olor… Pero bueno, vayamos al grano.

He estado pensando sobre esto, porque, ¿quién no se ha preguntado alguna vez si se está pasando con algo en la dieta? Y los huevos, ¡son tan socorridos! Pero claro, todo en exceso…

Dicen que para gente sana, cinco huevos al día no deberían ser un problema. A ver, yo no soy nutricionista, pero me suena lógico. Pero claro, “sana” es la palabra clave aquí, ¿no? Porque si ya vas con alguna cosilla dando vueltas, mejor andarse con ojo.

Lo que sí me da un poco de miedo es eso de llegar a 10 huevos… ¡Madre mía! Ya sólo pensarlo me siento un poco pesado. Y es que, según lo que he leído (por ahí andan los estudios, aunque no me los sé de memoria, para qué mentir), tanta proteína de golpe puede poner a trabajar los riñones a tope. Y claro, si tus riñones ya no van muy finos, o si tienes predisposición a cálculos, pues… ¡mal asunto!

Me acuerdo de mi abuelo, que era un poco “de extremos”. Un día se le antojó comer huevos revueltos para cenar, y se comió, no sé, ¿cuatro o cinco? Al día siguiente, bueno, no se sentía del todo bien. No digo que fuera por los huevos, pero me quedó la lección de que la moderación es importante.

Así que, en resumen, ¿cinco huevos al día? Quizás, pero con precaución. Y si te estás acercando a los 10… ¡ojo! No vaya a ser que acabes con problemas renales. Como dice el refrán, más vale prevenir que curar, ¿no crees? Yo creo que sí. Y tú, ¿qué opinas? ¿Alguna vez te has pasado con algún alimento? Cuéntame, que me interesa. 😉