¿Qué puede causar mucha acidez en la boca?

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La acidez en la boca suele ser un síntoma del reflujo gastroesofágico (ERGE), donde los ácidos del estómago suben al esófago. Ciertos alimentos, el consumo de alcohol y algunos medicamentos pueden relajar el esfínter esofágico inferior, permitiendo este reflujo y causando la sensación ácida. Si es frecuente, podría indicar una enfermedad crónica.

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El Fuego en la Boca: Descifrando las Causas de la Acidez Excesiva

La sensación de acidez en la boca, esa quemadura incómoda que asciende desde el estómago, es un problema común que afecta a millones de personas. Si bien a menudo se relaciona con una indigestión ocasional, una acidez persistente y severa puede ser señal de algo más serio. A diferencia de las explicaciones superficiales que se encuentran en línea, profundicemos en las causas subyacentes de esta desagradable experiencia, explorando factores más allá de los conocidos “culpables” como el café y el picante.

Como se menciona comúnmente, el reflujo gastroesofágico (ERGE) es la causa más frecuente de acidez excesiva. Este trastorno se produce cuando el esfínter esofágico inferior (EEI), una válvula muscular que separa el esófago del estómago, se debilita o relaja de forma inapropiada. Esto permite que el ácido gástrico, altamente corrosivo, refluya hacia el esófago, causando esa irritación y ardor característico. Pero ¿qué factores contribuyen a este debilitamiento del EEI y a la consecuente acidez?

Más allá de los alimentos grasos, fritos y picantes, y el alcohol, existen otras causas menos conocidas que merecen atención:

  • Hábitos alimenticios erróneos: No se trata sólo de qué comemos, sino también de cómo lo hacemos. Comer rápido, ingerir grandes cantidades de alimento en una sola sentada, y acostarse inmediatamente después de comer pueden exacerbar el reflujo. La presión abdominal aumentada dificulta el cierre adecuado del EEI.

  • Sobrepeso u obesidad: El exceso de peso ejerce presión adicional sobre el abdomen, contribuyendo a la relajación del EEI y favoreciendo el reflujo ácido.

  • Ciertos medicamentos: Algunos fármacos, incluyendo antiinflamatorios no esteroideos (AINEs), como el ibuprofeno y el naproxeno, y algunos antibióticos, pueden irritar el revestimiento del estómago e incluso relajar el EEI. Es crucial consultar con un médico antes de suspender cualquier medicación.

  • Hernia hiatal: Esta condición, en la que una parte del estómago sobresale a través del diafragma, puede provocar reflujo constante y severo.

  • Estrés: El estrés crónico puede afectar la función digestiva y contribuir a la acidez. La conexión mente-cuerpo es fundamental en la salud digestiva.

  • Embarazo: Los cambios hormonales y la presión abdominal durante el embarazo pueden causar reflujo ácido.

  • Enfermedades autoinmunes: En algunos casos, la acidez crónica puede ser un síntoma de una enfermedad autoinmune que afecta el sistema digestivo.

Cuándo consultar a un médico: Si la acidez es frecuente, intensa o se acompaña de otros síntomas como dolor torácico, dificultad para tragar, vómitos con sangre o heces negras, es fundamental buscar atención médica inmediata. Una acidez persistente podría indicar una condición crónica que requiere tratamiento.

En resumen, la acidez excesiva es un síntoma complejo que puede tener múltiples causas. Entender estas causas, más allá de la lista habitual de alimentos “prohibidos”, es crucial para un abordaje efectivo y la búsqueda de soluciones personalizadas que mejoren la calidad de vida. Recuerda que este artículo tiene un propósito informativo y no sustituye la consulta con un profesional de la salud.