¿Cómo se dice cuando dos personas se parecen?

¿Cómo describir a dos personas que se parecen?

¡Qué locura! Recuerdo a mis primas, gemelas idénticas, la gente siempre las confundía. Igualitas, hasta en la forma de caminar. Impresionante.

A veces, la gente decía que ver a alguien muy parecido a un conocido era mala suerte. Mi abuela decía eso, sobre todo si la persona era parecida a alguien enfermo.

En 2017, en mi pueblo, un amigo vio a alguien que era la viva imagen de su padre, días después su padre enfermó gravemente. Cosas raras.

No sé si es verdad lo de la mala suerte, pero sí que es impactante encontrarte con tu “doble”. Es una experiencia super intensa, me dejó un poco… ¿aturdida?

¿Parecidas? ¡Igualitas! Como si fueran fotocopias. Es la mejor forma de describirlo, creo.

¿Cómo se dice si dos personas son iguales?

Para indicar que dos personas son iguales, se utilizan “parejo” o “pareja”. Aunque, la Real Academia Española (RAE) define “parejo” como ‘igual, semejante o conforme en la calidad o estado’.

• La palabra parejo enfatiza la igualdad en cualidades o características.
• Mientras que pareja denota una relación o unión, usualmente amorosa o funcional.

Es curioso cómo el lenguaje refleja nuestra búsqueda constante de simetría, ¿no? Como cuando mi abuela decía que “todos somos iguales ante la ley”, aunque luego me explicaba las diferencias sutiles pero importantes entre tener y no tener “palancas”.

La percepción de igualdad es subjetiva y depende del contexto. A veces buscamos igualdad de oportunidades, otras veces, igualdad de resultados. Y, a menudo, lo que realmente anhelamos es ser valorados por nuestras diferencias, ¿verdad? Es un baile complicado, esta cosa de la igualdad.

En el fondo, somos todos un poco “parejos” en nuestra humanidad, aunque “pareja” solo la hagamos con algunos.

¿Cómo se le dice cuando dos personas se parecen?

Doppelgänger. Se dice así. Fin.

¿Más? No lo necesitas. Pero te lo doy.

• Semejanza fortuita. No es la misma sangre. Solo azar.

• Efecto espejo. Un eco visual. Superficial.

• Espectral. A veces, un presagio. Mal fario.

No me creo esas historias. Pero conozco a dos que eran clavados. Uno acabó mal. El otro… mejor no saberlo.

¿Cómo se le llama cuando hay dos personas iguales?

Gemelos. A dos personas iguales genéticamente se les llama gemelos.

• Gemelos monocigóticos (idénticos): Provienen de un único óvulo fecundado por un solo espermatozoide. Este cigoto se divide en dos, dando lugar a dos individuos con la misma información genética. Recuerdo una vez que leí un artículo sobre epigenética y cómo, a pesar de compartir el mismo ADN, los gemelos pueden desarrollar diferencias con el tiempo debido a la influencia del ambiente en la expresión de sus genes. Fascinante, ¿no?
• Gemelos dicigóticos (mellizos o fraternos): Se originan a partir de dos óvulos diferentes fecundados por dos espermatozoides distintos. Son como hermanos comunes que comparten el útero materno al mismo tiempo. Comparten, en promedio, el 50% de su material genético, como cualquier par de hermanos. Una vez, en una reunión familiar, mi primo, que es mellizo, me explicó que él y su hermano tienen personalidades completamente opuestas, a pesar de haber crecido juntos.

La gemelación monocigótica es un fenómeno aleatorio. No se hereda. Su incidencia es relativamente constante en todo el mundo, alrededor de 4 de cada 1000 nacimientos, según datos que revisé para un trabajo de la universidad este año.

Diferencias entre gemelos idénticos. A pesar de su idéntico ADN, los gemelos monocigóticos pueden presentar pequeñas diferencias físicas. Esto se debe, entre otros factores, a la influencia del ambiente intrauterino y a la propia casualidad del desarrollo.

• Huellas dactilares: Aunque comparten el mismo ADN, sus huellas dactilares son diferentes. Se forman durante el desarrollo fetal y están influenciadas por factores ambientales dentro del útero. Es como si la naturaleza nos recordara la individualidad inherente a cada ser, incluso en los casos de aparente duplicación. ¿No es una paradoja interesante?
• Marcas de nacimiento: También pueden tener marcas de nacimiento distintas.

Pensar en la gemelación siempre me lleva a reflexionar sobre la identidad. ¿Qué nos hace únicos? ¿Es solo nuestro ADN o hay algo más? Si la genética define tanto, ¿cómo explicar las diferencias entre gemelos idénticos?

Dato curioso: Leí en un libro de Sam Kean que la incidencia de gemelos dicigóticos varía según la etnia y la edad materna.

¿Cómo se dice cuando dos personas se parecen mucho?

¡Ah, el sosias! El doble andante, la réplica inesperada, el clon sin fotocopiadora. Se le llama así, sosias.

• Sosias: El individuo que, por caprichos del ADN o malas pasadas del destino, se asemeja a otro como dos gotas de… sudor en un gimnasio lleno.

A veces, uno se cruza con su sosias y es como mirarse en un espejo roto, ¡qué susto! Recuerdo una vez en 2023, confundí a un tipo en la cola del super con mi vecino, ¡y eso que mi vecino es calvo y el otro tenía una melena que envidiaría un león! Las apariencias engañan, ya lo decía mi abuela mientras intentaba venderme un calcetín desparejado como “pieza de diseño”.

El sosias es como la versión “low cost” de uno mismo, una edición “de bolsillo” que vaga por el mundo sin pedir permiso. Es el gemelo que nunca supimos que teníamos, el eco visual que nos persigue en la calle.

• Tópico literario: El sosias ha dado para ríos de tinta, desde el Anfitrión de Plauto hasta la novela más bizarra de tu estantería. ¿Por qué nos fascina tanto la idea de vernos duplicados? Quizás porque en el fondo, todos buscamos una versión mejorada de nosotros mismos, o al menos, una que se encargue de ir al dentista.

No sé tú, pero yo siempre he sospechado que tengo un sosias en Benidorm que se dedica a ganar concursos de imitadores de Elvis. Quizás algún día me anime a buscarlo y le pida que me sustituya en las reuniones familiares. ¡Sería un golpe maestro!

¿Cómo se dice cuando dos personas son parecidas?

¡Ay, la parecida! Decir que dos personas son iguales, ¡qué aburrido! Es como comparar dos gotas de lluvia: ¡idénticas en su esencia, pero cada una con su propia y peculiar historia de caída!

Usamos “gemelos” si hay un vínculo genético, claro. Pero si no, la palabra doppelgänger suena sofisticada, ¿no? Es como decir que has visto a tu yo alternativo en un universo paralelo, ¡casi una invasión de otro tú!

¿Otras opciones? Pues depende del contexto. ¡El ingenio es el límite! Podríamos usar:

• “Se parecen como dos gotas de agua”: clásica, pero efectiva. Como si la naturaleza, en un ataque de pereza creativa, usara el mismo molde dos veces.
• “Son idénticos”: directo, sin rodeos. Ideal si la semejanza es impactante, como si un clon hubiera escapado de un laboratorio.
• “Parecen hermanos”: Una opción sutil, que deja abierta la posibilidad a la broma: “¿Son hermanos? ¡Pregunto por si acaso necesito esconderme!”.
• “Son como dos guisantes en una vaina”: Un cliché encantador, tan dulce como esos guisantes de mi huerto (sí, tengo un huerto, ¡soy muy ecológico!).

Si la semejanza es solo superficial, podrías decir que comparten un “aire familiar”. O, si te sientes más audaz, puedes inventar una comparación extravagante: “se parecen como mi gato cuando duerme y una tostada quemada”. ¡La creatividad es clave!

Recuerda: la mejor opción depende del contexto y de tu ingenio. Yo, por ejemplo, uso “clones” para mis amigos que se visten igual. No es científica, pero es divertida.

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