¿Qué corta lo borracho?

No hay atajos: Desmintiendo el mito de “cortar la borrachera”

La idea de una solución mágica para “cortar” la borrachera es un mito persistente. Muchos recurren a remedios caseros o buscan una pastilla milagrosa que elimine rápidamente los efectos del alcohol, pero la realidad es que no existe tal cosa. Si bien circulan consejos populares sobre cómo “bajar la peda” rápidamente, estos rara vez funcionan y pueden incluso ser perjudiciales. Es fundamental entender que el único método efectivo para contrarrestar la intoxicación alcohólica es el tiempo. El cuerpo necesita tiempo para procesar y eliminar el alcohol del sistema.

Es común escuchar de remedios como café fuerte, duchas frías o comidas copiosas para “cortar” la borrachera. Sin embargo, estas prácticas solo enmascaran los síntomas temporalmente. El café, por ejemplo, puede hacer que una persona intoxicada se sienta más alerta, pero no reduce la concentración de alcohol en sangre. Similarmente, una ducha fría puede generar una sensación de revitalización momentánea, pero no acelera el metabolismo del alcohol. Ingerir alimentos, especialmente si son ricos en grasas, puede retrasar la absorción del alcohol, pero no la elimina del organismo.

Es importante destacar que la creencia en la existencia de una cura instantánea para la embriaguez puede ser peligrosa. Esta falsa sensación de seguridad puede llevar a las personas a subestimar su nivel de intoxicación y a tomar decisiones arriesgadas, como conducir bajo los efectos del alcohol.

A veces se mencionan medicamentos como el acamprosato, el disulfiram y la naltrexona en el contexto de “cortar” la borrachera. Sin embargo, es crucial aclarar que estos fármacos no revierten la intoxicación alcohólica. Se trata de tratamientos para el trastorno por consumo de alcohol, diseñados para ayudar a las personas a mantener la abstinencia a largo plazo, reduciendo los antojos y la dependencia. No tienen efecto inmediato sobre la intoxicación aguda.

En resumen, la mejor manera de “cortar” la borrachera es evitarla en primer lugar. Beber con moderación, mantenerse hidratado y espaciar las bebidas alcohólicas son estrategias clave para prevenir la intoxicación. Si ya se ha consumido alcohol en exceso, lo único que realmente funciona es el tiempo. Descansar, hidratarse con agua y esperar a que el cuerpo procese el alcohol es la única forma segura y efectiva de eliminar sus efectos. No existen atajos mágicos, y la búsqueda de estos puede ser contraproducente. La responsabilidad y la prevención son fundamentales para disfrutar del alcohol de manera segura y evitar las consecuencias negativas de la intoxicación.