¿Qué pueblos hay cerca de Benicàssim?

Más allá de Benicàssim: Un viaje por los pueblos encantadores de la provincia de Castellón

Benicàssim, con sus playas doradas y su vibrante ambiente festivalero, es un destino turístico indiscutible. Sin embargo, su encanto se extiende más allá de sus límites, abriendo las puertas a un fascinante mosaico de pueblos con historias y paisajes únicos que esperan ser descubiertos. Abandonar la costa por un día, o incluso por unas horas, permite adentrarse en el corazón de la provincia de Castellón y disfrutar de una experiencia completamente diferente.

A pocos kilómetros de Benicàssim se encuentran auténticas joyas arquitectónicas y naturales que merecen una visita. No se trata solo de cambiar de escenario, sino de sumergirse en la esencia misma de la cultura y la historia de la región.

Villafamés: Este pueblo, encaramado sobre una colina, ofrece unas vistas panorámicas impresionantes. Su casco antiguo, declarado Conjunto Histórico-Artístico, es un laberinto de callejuelas empinadas que conducen a la imponente iglesia parroquial y al castillo, testigos mudos de siglos de historia. La tranquilidad de Villafamés y su rica gastronomía, con productos locales de alta calidad, lo convierten en un remanso de paz perfecto para desconectar del bullicio costero. Sus museos, dedicados al arte y a la historia local, completan la oferta cultural.

Peñíscola: A un corto trayecto en coche, Peñíscola se alza majestuosa sobre el Mediterráneo. Su imponente castillo del Papa Luna, situado en un promontorio rocoso, domina el horizonte. Peñíscola combina la belleza de sus playas con el encanto de su casco antiguo, un laberinto de calles estrechas y casas blancas que parecen abrazarse al mar. La oferta de ocio es amplia, desde actividades náuticas hasta un animado ambiente nocturno, pero conserva la tranquilidad propia de un pueblo mediterráneo con una rica historia.

Culla: Para los amantes de la arquitectura medieval, Culla es una visita obligada. Este pueblo, situado en el interior, exhibe un excepcional patrimonio arquitectónico, destacando su imponente castillo y sus casas de piedra, que parecen desafiar el paso del tiempo. Rodeado de un paisaje de contrastes, entre montañas y valles, Culla ofrece la oportunidad de practicar senderismo y disfrutar de la tranquilidad del campo. La visita a su castillo, que se eleva sobre el pueblo, ofrece unas vistas espectaculares de la zona.

Más allá de estos tres: La provincia de Castellón alberga numerosos pueblos con un encanto similar, cada uno con su propia personalidad. Desde pequeños pueblos costeros como Alcalà de Xivert o Oropesa del Mar, hasta otros situados en el interior, como Morella o Lucena del Cid, cada uno ofrece una experiencia diferente y enriquece el viaje por esta región vibrante y fascinante.

En definitiva, Benicàssim es un excelente punto de partida para explorar la riqueza de la provincia de Castellón. Alejarse unos kilómetros de la costa permite descubrir la autenticidad de sus pueblos, sus historias, su gastronomía y sus paisajes, ofreciendo una experiencia completa e inolvidable a cualquier visitante. Planifique su escapada y descubra la belleza que se esconde más allá de las playas de Benicàssim.