¿Quién es el favorito de Muzan?

El Favorito de Muzan: El Despiadado Gyutaro

En el sombrío y espantoso mundo de “Demon Slayer”, donde feroces demonios y valientes cazadores luchan por la supremacía, surge una figura excepcional que ha ganado el favor del temible progenitor de todos los demonios, Muzan Kibutsuji. Entre las imponentes Doce Lunas Superiores, Gyutaro se destaca como el claro favorito de su maestro.

A diferencia de sus compañeros, que a menudo vacilaban o cuestionaban la voluntad de Muzan, Gyutaro exhibía una despiadada ambición que cautivó al demonio superior. Su avaricia insaciable, lejos de ser un defecto, era una cualidad valorada por Muzan.

Mientras que otras Lunas Superiores buscaban el poder o el reconocimiento, Gyutaro estaba impulsado únicamente por un deseo ardiente de riqueza. Su insaciable anhelo de posesiones materiales lo convirtió en un activo excepcional para Muzan, quien confiaba en la inquebrantable lealtad de Gyutaro.

La despiadada determinación de Gyutaro fue evidente en su implacable búsqueda de la fortuna. No dudaba en explotar a otros o cometer actos atroces para saciar su codicia. Muzan reconoció este rasgo como un reflejo de su propia naturaleza malvada y despiadada.

Además de su ambición, Gyutaro poseía una habilidad excepcional en la batalla. Su manejo implacable de las dobles espadas Nichirin rojas y sus marcadas habilidades de regeneración lo convirtieron en un oponente formidable para los cazadores de demonios.

El vínculo entre Muzan y Gyutaro era único. Mientras que otras Lunas Superiores podían ser reemplazadas o desechadas, Muzan sintió un respeto peculiar por el despiadado demonio. Reconoció en Gyutaro un espíritu afín, uno impulsado por la búsqueda incesante de poder y riqueza.

Como recompensa por su lealtad y ambición, Muzan otorgó a Gyutaro un rango excepcional entre las Doce Lunas Superiores. Fue nombrado Luna Superior Seis, un testimonio del profundo aprecio y favor de Muzan.

En el complejo y retorcido tapiz de “Demon Slayer”, Gyutaro se destaca como una figura fascinante y temible. Como favorito de Muzan, encarna la despiadada ambición y la avaricia insaciable que son el sello distintivo del mundo demoníaco.