¿Cómo saber si el sujeto es expreso o tacito?

¿Cómo saber si el sujeto es expreso o tácito? Ay, Dios mío, ¡qué lío me metí con esto cuando estudiaba gramática! Recuerdo que me volvía loca, ¿verdad que sí? Parecía un jeroglífico, un enigma. Pero ahora, mirándolo con más calma, me doy cuenta de que… ¡es más sencillo de lo que parece!

Si ves el sujeto ahí, plantado como un roble, bien clarito en la oración, como en “Antonio comió una pizza enorme”, pues entonces es expreso. ¡Pam! Ahí está, sin tapujos. Fácil, ¿no? Es como ver a tu mejor amigo en la calle, no hay duda de quién es.

Pero… ¿qué pasa cuando no lo vemos? ¿Cuando el sujeto está como… escondido? Eso es tácito. Piensa en frases como “Comí una pizza enorme”. ¿Quién comió la pizza? Pues yo, ¿no? Está implícito, se entiende por el contexto. Es como cuando mi abuela me llamaba para comer sin decir mi nombre, ya sabía que era para mí, ¿entiendes? Era un código secreto entre nosotras. Es una maravilla, ¿verdad? El español, con su capacidad para omitir cosas, pero ¡cómo entendemos todo!

Claro que, a veces, puede ser un poquito más complicado de lo que suena… Hay frases donde te quedas pensando: “¿Pero quién está haciendo qué aquí?” Ahí es donde hay que usar el ingenio, el sentido común, y a veces, hasta un poco de intuición. Es como resolver un pequeño rompecabezas, pero ¡qué satisfacción cuando logras descifrarlo! A mí, me fascina esa capacidad, esa economía de palabras, es como un arte, una magia… ¡un código secreto entre hablantes nativos! Un 80%, o algo así, de las oraciones en español, creo, son así, con el sujeto tácito. (Lo leí en algún sitio, pero no recuerdo exactamente dónde, ¡qué desastre de memoria tengo!). Pero la idea es que es más común de lo que piensas. En fin, espero que te sirva. ¡Mucha suerte con tus estudios de gramática!