¿Por qué sólo puedes ver la mitad de la luna?

¿Por qué solo podemos ver la mitad de la Luna?

A diferencia de la Tierra, la Luna no gira sobre su propio eje mientras orbita la Tierra. En cambio, se encuentra en una rotación sincronizada con su órbita, lo que significa que el mismo lado de la Luna siempre mira hacia la Tierra.

Rotación sincronizada

La rotación sincronizada es un fenómeno astronómico en el que el período de rotación de un cuerpo celeste coincide con su período orbital alrededor de otro cuerpo más grande. En el caso de la Luna, completa una rotación sobre su eje en el mismo tiempo que tarda en orbitar la Tierra, que es aproximadamente 27,3 días.

Esto significa que la misma cara de la Luna siempre está orientada hacia nosotros, mientras que el otro lado, conocido como el “lado oscuro de la Luna”, nunca es visible desde la Tierra. Sin embargo, esta afirmación no es del todo precisa.

Libraciones

Si bien solo podemos ver la mitad de la Luna directamente, gracias a un fenómeno conocido como libraciones, podemos observar hasta un 59% de su superficie. Las libraciones son pequeños movimientos de balanceo de la Luna que permiten que sea visible una pequeña parte de su lado “oculto”.

Estas libraciones son causadas por las variaciones en la órbita tanto de la Tierra como de la Luna. La órbita de la Luna en torno a la Tierra no es perfectamente circular, sino más bien elíptica, lo que hace que su velocidad orbital varíe ligeramente. Además, el eje de rotación de la Luna se inclina ligeramente con respecto a su órbita, lo que provoca pequeñas oscilaciones en la orientación de la cara visible.

Como resultado de estas libraciones, podemos ver una pequeña parte del lado oculto de la Luna desde diferentes ángulos a lo largo de un mes. Por ejemplo, en la luna nueva, cuando la Luna está entre la Tierra y el Sol, podemos ver una pequeña parte del borde del lado oculto, conocida como “uña”.

Beneficios de las libraciones

La capacidad de observar más del 50% de la superficie de la Luna ha permitido a los científicos mapear y estudiar su terreno en mayor detalle. Sin las libraciones, solo podríamos ver la mitad de la Luna, lo que limitaría significativamente nuestra comprensión de su geología y composición.

Conclusión

Aunque podemos ver directamente solo la mitad de la Luna, las libraciones nos permiten observar hasta el 59% de su superficie. Esto ha sido fundamental para ampliar nuestros conocimientos sobre el único satélite natural de la Tierra. Si bien el lado oscuro de la Luna sigue siendo un misterio, gracias a las libraciones, podemos vislumbrar más allá de lo que es visible a simple vista.