¿Qué color sale si mezclo rojo y verde?

El Misterio del Amarillo: ¿Rojo + Verde = ?

La pregunta parece sencilla, casi infantil: ¿Qué color obtengo al mezclar rojo y verde? La respuesta, sin embargo, revela un principio fundamental de la percepción del color y la diferencia crucial entre la mezcla de pigmentos (sustractiva) y la mezcla de luces (aditiva). Mientras que la intuición podría llevarnos a pensar en un color intermedio, como el marrón o un verde amarillento apagado, la realidad es sorprendentemente diferente.

Cuando mezclamos luces rojas y verdes, el resultado es un amarillo puro y vibrante. Esto se debe al proceso de síntesis aditiva del color, el sistema utilizado en pantallas de computadoras, televisores y proyectores. En este sistema, los colores primarios –rojo, verde y azul (RGB)– se combinan para generar otros colores. Al combinar rojo y verde, estimulamos los conos (células receptoras de luz en la retina) responsables de la percepción del rojo y del verde. Esta estimulación simultánea, en lugar de generar una sensación de “mezcla” entre ambos colores, engaña al cerebro para que perciba el amarillo. Es como si los receptores fueran “sumados” en lugar de “mezclados”, de ahí el término “síntesis aditiva”.

La clave reside en la forma en que nuestro sistema visual procesa la información lumínica. El amarillo no es un color intermedio en el sentido de una gradación suave entre el rojo y el verde. En cambio, es un color “percibido” como resultado de la activación específica de ciertas células receptoras de la retina. Esta percepción es tan precisa que el resultado no es un amarillo sucio o deslavado, sino un amarillo puro, similar al obtenido con una luz amarilla monocromática.

Comparativamente, la mezcla de pigmentos, como las pinturas, sigue un principio diferente, el de la síntesis sustractiva. En este caso, los pigmentos absorben ciertas longitudes de onda de la luz y reflejan otras. Al mezclar pigmentos rojos y verdes, el resultado es generalmente un marrón oscuro o un tono apagado, lejos del amarillo vibrante que obtenemos con la mezcla de luces. Esta diferencia fundamental ilustra cómo la percepción del color depende no solo de la composición física de la luz o el pigmento, sino también del complejo proceso de interpretación en nuestro cerebro. Por lo tanto, la próxima vez que se pregunte qué ocurre al mezclar rojo y verde, recuerde que la respuesta depende crucialmente del contexto: luces o pigmentos. En el caso de las luces, la respuesta es un sorprendente y puro amarillo.

#Colorverderojo #Mezclacolores: #Rojoverde: