¿Qué diferencia hay entre los datos cuantitativos y cualitativos?

Más allá de los números: Descifrando la diferencia entre datos cualitativos y cuantitativos

En el vasto universo de la investigación, los datos son la materia prima que nos permite comprender el mundo que nos rodea. Sin embargo, no todos los datos son iguales. Una distinción fundamental reside en la naturaleza misma de la información que recopilan: hablamos de datos cualitativos y cuantitativos, dos caras de una misma moneda que, si bien diferentes, se complementan para ofrecer una visión holística de cualquier fenómeno.

Imaginemos que queremos estudiar la experiencia de los usuarios con una nueva aplicación móvil. Podríamos preguntarles cuántas veces al día la utilizan (dato cuantitativo, medible y numérico). Pero también podríamos indagar sobre cómo se sienten al usarla, qué aspectos les resultan más útiles o qué les gustaría mejorar (datos cualitativos, descriptivos y basados en la experiencia subjetiva).

La diferencia radica, pues, en la forma en que se expresan y el tipo de información que aportan. Los datos cuantitativos se centran en lo medible, en aquello que podemos expresar con números. Se basan en la cantidad, la frecuencia, la magnitud. Nos permiten realizar análisis estadísticos, establecer comparaciones objetivas y identificar patrones y tendencias. Pensemos en ejemplos como la edad, el peso, la altura, el ingreso mensual o el número de visitas a una página web. Su fortaleza reside en la precisión y la posibilidad de generalizar los resultados a una población más amplia.

Por otro lado, los datos cualitativos exploran el cómo y el porqué de los fenómenos. Se adentran en el terreno de las percepciones, las opiniones, las motivaciones, los significados y las experiencias. Buscan comprender la complejidad de las realidades humanas y sociales, profundizando en aspectos subjetivos que no pueden ser capturados por simples números. Ejemplos de datos cualitativos son las transcripciones de entrevistas, las notas de campo de una observación, las respuestas abiertas en un cuestionario o el análisis de contenido de un discurso. Su valor reside en la riqueza descriptiva y la capacidad de generar nuevas hipótesis y comprender las perspectivas de los individuos.

En resumen, mientras los datos cuantitativos responden al cuánto, los cualitativos se enfocan en el cómo y el porqué. No se trata de elegir uno u otro, sino de reconocer su valor complementario. Al combinar ambos tipos de datos, obtenemos una comprensión más profunda y completa de cualquier fenómeno, enriqueciendo la investigación y abriendo nuevas vías para la interpretación y el análisis. La clave está en utilizar la herramienta adecuada para cada pregunta de investigación, aprovechando la potencia de ambos enfoques para construir un conocimiento más robusto y significativo.