¿Qué es un compuesto químico UNAM?

¿Qué es un compuesto químico según la UNAM?

La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), al igual que la comunidad científica internacional, define un compuesto químico como una sustancia formada por la unión de dos o más elementos químicos de la tabla periódica. Esta unión no es una simple mezcla, sino una combinación que ocurre en proporciones definidas y constantes, regida por las leyes de la química, dando lugar a una nueva sustancia con propiedades físicas y químicas distintas a las de los elementos que la componen. Esta nueva entidad se representa mediante una fórmula química específica que refleja la proporción de cada elemento presente.

Para entenderlo mejor, imaginemos la construcción de una casa. Los ladrillos, el cemento, la madera, etc., serían los elementos químicos. Por separado, cada uno tiene sus propias características y usos. Sin embargo, al combinarlos en proporciones específicas y de una manera organizada, siguiendo un plano (las leyes químicas), construimos una casa (el compuesto químico), que tiene propiedades y funciones completamente diferentes a las de los materiales individuales. La “fórmula” de la casa sería el plano que indica cómo y en qué cantidad se combinan los materiales.

De igual manera, la molécula de agua (H₂O) es un compuesto químico formado por la unión de dos átomos de hidrógeno y uno de oxígeno. Tanto el hidrógeno como el oxígeno son gases en su estado puro a temperatura ambiente. Sin embargo, al combinarse químicamente, forman el agua, un líquido esencial para la vida, con propiedades completamente distintas a las de sus componentes. La fórmula H₂O nos indica la proporción fija de dos átomos de hidrógeno por cada átomo de oxígeno en cada molécula de agua.

La definición de compuesto químico de la UNAM enfatiza la importancia de la proporción definida y constante. Esto significa que un compuesto siempre tendrá la misma composición, independientemente de su origen o método de preparación. Por ejemplo, el agua pura siempre será H₂O, ya sea obtenida de un río, de la lluvia o de una reacción química en un laboratorio. Esta constancia en la composición es una característica fundamental que distingue a los compuestos químicos de las mezclas, donde las proporciones de los componentes pueden variar.

Finalmente, es crucial recordar que la formación de un compuesto químico implica una transformación química, es decir, un reordenamiento de los átomos y la formación de enlaces químicos entre ellos. Este proceso generalmente va acompañado de una liberación o absorción de energía. Por lo tanto, un compuesto químico no es simplemente una mezcla física de elementos, sino una nueva entidad con su propia identidad y características definidas por la interacción química entre sus componentes.