¿Qué significa la Formación Profesional?

¿Qué tipos de formaciones profesionales hay?

Medianoche. Otra vez. La luz de la pantalla me quema la cara… ¿Formación Profesional? Qué ironía. Como si planear un futuro fuera posible.

Actividades Físicas y Deportivas. Recuerdo querer ser futbolista. Ridículo. Ahora apenas puedo levantarme del sofá algunos días.

• Administración y Gestión. Papeles, papeles y más papeles. Una prisión de burocracia. No, gracias. Nunca se me dieron bien los números. Ni organizar mi propia vida.

• Agraria. Tierra, naturaleza… suena a paz. Lejos de esta ciudad… Lejos de mí mismo. Pero requiere esfuerzo. Un esfuerzo que ya no tengo.

Me duele la cabeza. Quizás debería… no sé. Dormir. Olvidar.

• Artes Gráficas. Dibujar… Solía ser mi escape. Ahora solo son manchas borrosas en mi mente. Manchas como las de mi vida.

• Artes y Artesanías. Crear algo con las manos… una idea bonita. Hueca. Como yo. El arte exige pasión. Y la mía se consumió hace mucho.

• Comercio y Marketing. Vender, convencer… engañar. No podría. Ni siquiera puedo convencerme a mí mismo de que valgo algo. Otra noche sin dormir.

Edificación y Obra Civil. Construir… Un futuro sólido. Imposible sobre mis cimientos rotos. Recuerdo a mi padre, albañil… Él sí construyó algo. Yo solo destruyo.

• Electricidad y Electrónica. Luces, circuitos… un mundo complejo. Demasiado complejo para mí. Prefiero la oscuridad. La oscuridad de mi habitación. Mi refugio.

Este año mi hermana pequeña empieza bachillerato. Quiere estudiar medicina. Dice que quiere ayudar a la gente. Qué ingenua. Ojalá pudiera decirle la verdad. Que la vida… la vida te desgasta. Te vacía. Te deja solo con la pantalla de un móvil a las tres de la mañana, buscando salidas que no existen. Formación Profesional… Qué broma.

¿Qué significa formación para el Empleo?

Formación para el empleo: aprender a cazar mamuts en el siglo XXI. O, dicho de otro modo, adiestrarte para sobrevivir en la jungla laboral.

• Objetivo principal: Que no te extingas profesionalmente.
• Público objetivo: Tanto si estás en la cima de la cadena alimentaria (con empleo) como si te has caído del árbol (desempleado).

¿En qué consiste? Pues mira, imagínate un buffet libre de conocimientos. Hay para todos los gustos: desde aprender a usar la lanza (ofimática básica) hasta domesticar el fuego (programación). Y todo con el noble propósito de que puedas mejorar tu currículum y encontrar un trabajo, o escalar posiciones en el que ya tienes. Es decir, pasar de recolector de bayas a jefe de la tribu.

Un inciso. A mí, personalmente, me obligaron a hacer un curso de “Excel para principiantes” en 2023. Y yo, con mi Nokia 3310, tan contento. ¡Ironías de la vida moderna! Pero bueno, al final aprendí a hacer fórmulas y hasta gráficas de quesitos. Quién me lo iba a decir…

Volviendo al tema, esta formación la financia el Estado (¡tus impuestos en acción!), así que, en teoría, es gratis. Aunque luego te toque lidiar con plataformas online que parecen diseñadas por ingenieros del Apocalipsis. Pero ese es otro cantar.

• Ventajas: Más opciones laborales, mayor salario (potencialmente), y la satisfacción de aprender cosas nuevas.
• Desventajas: A veces, los cursos son un poco rollo. Y puede que te toque compartir clase con gente que aún cree que la Tierra es plana. Pero oye, ¡así practicas la paciencia!

Yo, por ejemplo, aprendí a hacer macramé gracias a un curso de estos. Ahora hago pulseras para mis sobrinos (y para vender en Etsy, no se lo digas a nadie). Nunca se sabe cuándo te puede ser útil una nueva habilidad, ¿verdad?

En definitiva, la formación para el empleo es una inversión en tu futuro. Como plantar un árbol. Tarda un poco en dar frutos, pero a la larga merece la pena. Aunque solo sea para poder presumir en las cenas familiares.

¿Qué relación hay entre la Formación Profesional y la práctica laboral?

A veces, en la oscuridad, me pregunto…

La FP es un puente, sí, pero… un puente a medio construir. Te prometen el otro lado, la vida laboral, pero a veces te dejan a mitad de camino, colgando.

• En 2024, participé en un proyecto con una empresa local. Era la panacea, al menos en teoría.
• La realidad… era otra. Tareas repetitivas, poca conexión con lo que estudié.
• Sentí que mi entusiasmo se diluía, como azúcar en agua fría.

Te enseñan las herramientas, pero no cómo usarlas de verdad.

• La práctica laboral, supuestamente, te da esa experiencia. Pero ¿qué pasa si esa práctica es una sombra de lo que te prometieron?
• ¿Qué pasa si te sientes más un becario explotado que un futuro profesional?
• Yo quería construir, crear, innovar.
• Acabé… fotocopiando documentos.

Es una oportunidad, claro, pero a veces se queda corta.

• Quizás la FP debería ser más exigente, más realista.
• Quizás las empresas deberían tomarse más en serio su papel.
• Quizás yo esperaba demasiado.
• Quizás… solo quizás…

¿La relación? Te abre la puerta, pero no te garantiza el éxito. Depende de ti, de la empresa, del destino… de tantas cosas.

¿Cuál es la FP con mayor salida laboral?

Uf, ¿qué FP tiene más salida? A ver… me acuerdo que mi primo hizo algo de electrónica y le fue bien, ¿no? Aunque ahora todo el mundo habla de la informática. 🤔

Electricidad y Electrónica, Informática y Comunicaciones, Administración y Gestión, Comercio y Marketing: ¡ahí está! Esas son las que más buscan las empresas en España este año. Simple.

• ¿Pero por qué esas?
• ¿Será por la digitalización?
• ¿O porque la gente necesita quien le administre el dinero?
• Yo que sé.

¿Por qué Electricidad? Pues igual porque siempre hay algo que se estropea, ¿no? Y la gente no quiere arriesgarse a electrocutarse. Mi vecino intentó arreglar un enchufe y casi la palma! Jajaja.

Informática… obvio. ¡Todo está en la nube! ¿Y Administración? Bah, papeleo eterno. Siempre habrá papeleo. ¿Comercio y marketing? Para vender humo supongo. Pero bueno, ¡alguien tiene que hacerlo!

Yo estudié historia. ¿Salida laboral? Ninguna. 😅 Debería haber hecho algo de esto… o fontanería. Que también da pasta.

¿Qué se entiende por formación en el trabajo?

Buf, formación en el trabajo… Me acuerdo de cuando entré en la pastelería de mi tía Emilia, verano del 2024, en Valencia. El olor a azúcar quemado, uff, horrible al principio. Aprendizaje práctico, eso es. Emilia, ni un papel, ni un libro, solo “Mira, chaval, así se estira la masa”.

Me enseñó a hacer la crema pastelera, la masa de hojaldre, a usar el horno ese enorme que parecía una nave espacial. Me quemaba los dedos, hacía un desastre, pero bueno… Adquirir habilidades específicas, ahí estaba yo, sudando como un pollo.

Desarrollar competencias. Más bien, desarrollar paciencia infinita con mi tía. Un día, se me cayó una bandeja entera de croissants recién hechos. Casi me da algo. Pensé que me mataba. Experiencia directa. Ya te digo. Mucho mejor que cualquier curso. Aprender haciendo.

• Hornear (sobrevivir a la mirada de mi tía).
• Decorar (no tan desastroso como lo de los croissants).
• Atención al público (lidiar con señoras que preguntan por el azúcar glass sin parar).

Total, que la formación en el trabajo es aprender haciendo, en el sitio, con la gente, y a base de errores gloriosos. Acabé hasta las narices de croissants, pero aprendí de verdad. Hasta inventé un pastel de chocolate con naranja. Buenísimo.

Formación en el trabajo: Aprendizaje a través de la experiencia laboral.