¿Cuándo es el día del dinero?
¡Del 18 al 24 de marzo de 2024 se celebra la Semana Mundial del Dinero! Este año, el lema "Protege tu dinero, asegura tu futuro" promueve la gestión financiera responsable y consciente. Infórmate y toma el control de tus finanzas.
¿Cuándo se celebra el Día del Dinero y cuál es su importancia?
Uf, el Día del Dinero… o mejor dicho, la Semana Mundial del Dinero, ¿no? Este año, 2024, cayó del 18 al 24 de marzo. Recuerdo que justo estaba organizando mi viaje a Asturias, y andaba buscando vuelos baratos, ¡una locura!
El tema era “Protege tu dinero, asegura tu futuro”. Muy acertado, la verdad. Yo, que andaba con la calculadora en la mano para ese viaje (que por cierto, me costó unos 600 euros, vuelos incluidos), lo sentí muy personal.
Me impactó mucho la idea de una gestión responsable del dinero. Es clave, ¿no? Llevo años intentando controlar mejor mis gastos, y aunque a veces me lío, aprendo poco a poco. Ese año empecé con una app para el presupuesto, ¡una maravilla!
En resumen, la Semana Mundial del Dinero, en marzo, me recordó la importancia de la planificación financiera. Una lección que, como muchos, estoy aprendiendo a paso lento.
¿Cuál es el Día Mundial del Ahorro?
¡31 de octubre! Día Mundial del Ahorro… ¿qué pereza me da eso de ahorrar, eh? Siempre se me olvida. Aunque… este año sí que estoy intentando. Ya llevo tres meses con mi plan. Es que, necesito ese viaje a Cancún, ¡ya está planeado todo! Vuelos, hotel… solo falta el dinero.
Ahorrar, según la CNBV, es guardar parte de la pasta para el futuro. ¿Futuro? ¡Cancún es mi futuro! Ja, ja. Es que necesito un descanso. El trabajo está… agobiante. Necesito desconectar. Este año, el estrés está al máximo. Y la jefa… ¡Ay, la jefa! Siempre con exigencias nuevas.
¿Para qué quiero imprevistos? ¡Ya tengo suficiente con los imprevistos diarios! ¡Como si el trabajo no fuera un imprevisto en sí mismo! Necesito controlar mejor mis gastos. He empezado a usar una app. A ver si funciona. Necesito ese viaje. Necesito ese relax…
- Viaje a Cancún: ¡prioridad número uno!
- Gastos controlados: aplicación móvil para eso.
- CNBV: su definición de ahorro es… aburrida.
- ¡Ahorrar es para el futuro, pero mi futuro es Cancún!
Odio las definiciones formales… aunque sí, necesito ahorrar. No para imprevistos, para Cancún. Ya llevo 500 euros… ¡casi nada! ¡Falta mucho! ¡Pero lo lograré! Este año será diferente. ¡Lo juro! Tengo fe.
¡Ay, que me dan ganas de un café ahora mismo!
¿Cuál es el propósito del dinero?
¿Cuál es el propósito del dinero? Permite pagar por un bien o servicio. Es decir se utiliza para realizar un intercambio comercial o negocio. Es una unidad de medida y cuenta, ya que expresa un precio y permite comparar los valores de los bienes y servicios que deseamos adquirir o contratar.
El dinero…
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Pagar. Un trueque frío, eso es. Un vale por un pedazo de vida, supongo.
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Intercambio. Siempre algo por algo. Nunca gratis. Nada lo es realmente.
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Medir. Unidades. Como si la felicidad pudiera tasarse así, en euros.
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Comparar. Ver quien tiene más, quien tiene menos. Esa es la verdad. Una carrera sin fin.
Últimamente pienso… en todas las veces que me sentí vacío a pesar de tener “suficiente”. Recuerdo cuando mi abuelo vendió su vieja cámara. La necesitaba. Pero perdió algo más que una simple cámara. Perdió recuerdos.
¿Realmente sirve para algo? A veces me pregunto si solo es una ilusión colectiva, una pesadilla compartida. Un juego absurdo al que todos jugamos, nos guste o no.
¿Por qué se celebra el día del Ahorro de Energía el 21 de octubre?
El 21 de octubre conmemoramos el Día Mundial del Ahorro de Energía. ¿La razón? Surge de una iniciativa del Foro Energético Mundial.
- Promover el acceso universal a la energía es el objetivo principal. ¡Qué ambicioso!
- Dubai, año 2012. Ahí se celebró la primera edición, marcando el inicio de una concienciación global.
A veces pienso que el ahorro de energía es como ahorrar palabras: un acto de inteligencia y respeto. No se trata solo de gastar menos, sino de usar mejor lo que tenemos. De repente me acuerdo de mi abuela, siempre apagando las luces… ¡Tenía razón! Y es que la energía, al igual que el tiempo, es un recurso finito. Es como cuando leemos un buen libro; no queremos que termine, ¿verdad?
¿Sabías que algunos países están experimentando con energía mareomotriz? Imagina, ¡la fuerza del mar convirtiéndose en luz! Ojalá pronto veamos más innovaciones así.
Este día no es un simple recordatorio, sino una invitación a la acción. Un pequeño gesto nuestro, sumado a millones, puede generar un gran cambio. Apagar un interruptor, usar bombillas eficientes, informarnos sobre energías renovables… Cada acción cuenta, ¡y mucho!
Por cierto, ¿alguna vez te has preguntado de dónde viene la electricidad que usas? Es un ejercicio interesante.
¿Qué significa el día del ahorro escolar?
¡Uy, qué buena pregunta! El Día del Ahorro Escolar, ¿sabes? Es para que los niños aprendan a ahorrar desde peques, ¡es súper importante! Es como… ¡meterles el gusanillo del ahorro en la cabeza! No sé si tú lo recuerdas, pero en mi cole, era un día que hacíamos cosas chulas.
Este año, como todos los 31 de octubre, se celebra. Se celebra en honor a ese congreso ¡guau! que hubo en 1924 en Milán, Italia. ¡Imagínate, un montón de gente hablando de ahorrar! Ahorrar es clave eh, para el futuro, ya sabes. Yo, cuando era niña, guardaba mis monedas en una hucha de cerdito rosa, ¡la mejor hucha del mundo! Me encantaba ver como se llenaba.
El objetivo es enseñar a ahorrar a los niños. Es fundamental para su futuro, ¿verdad? No es solo guardar dinero, es aprender a administrarlo. ¡Eso sí que es importante! De hecho, en mi escuela primaria… o era la secundaria, ya ni me acuerdo… ¡hicimos una obra de teatro sobre el ahorro! ¡jajaja! Fue divertidísimo.
Aquí te dejo algunas ideas que se hacen en muchos colegios:
- Talleres de educación financiera: ¡super práctico!
- Juegos sobre ahorro: ¡aprendiendo mientras te diviertes!
- Charlas con expertos: siempre vienen bien esas charlas.
- Campañas de concienciación: para que todos colaboren.
En fin, el Día del Ahorro Escolar es clave para el futuro financiero de los niños. ¡Algo que deberíamos celebrar más! Ya sabes, ¡ahorrar, ahorrar y ahorrar! ¡Incluso yo, que soy un desastre, lo intento! Bueno, a veces. Mi hermana mayor, ella si que es buena ahorradora, ¡una máquina!. Este año intentaré comprarme esa guitarra que tanto me gusta. ¡Aunque sea poco a poco!
¿Quién inventó el día del ahorro?
Milán, 1924. Congreso del Ahorro.
No sé bien cómo llegué aquí, a pensar en esto, en el Día del Ahorro. Una sombra italiana, nacida de la necesidad, supongo.
- Quizás alguien vio el futuro venir. Uno siempre intuye algo.
- 31 de octubre. Una fecha… curiosa.
- Guerra, después la Gran Depresión, luego otra guerra. Mucho para ahorrar, ¿no?
A veces pienso que ahorrar es guardar silencio. Guardar las palabras que no digo, las lágrimas que no lloro. Como mis recuerdos de la abuela, guardados bajo llave. Siempre decía “Guarda para cuando lo necesites”, pero… ¿y si nunca llega ese momento? ¿Y si el ahorro solo es una forma de no vivir?
¿Quién inventó el día del ahorro? No lo sé. Pero inventaron una forma de guardar… quién sabe.
¿Qué representa el ahorro?
El ahorro, ¡oh, esa esquiva quimera!, es básicamente el arte de resistirse al canto de sirena del consumo inmediato. Imagina que tus ingresos son un río. El ahorro es ese pequeño canal que desvías para regar tu jardín de inversiones o, si eres previsor, para llenar el aljibe por si llega la sequía.
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No gastar todo: ¡Eureka! La clave. ¿Recuerdas ese jersey con lentejuelas que te gritaba desde el escaparate? Bueno, el ahorro te susurra: “Piensa en las vacaciones en 2024.”
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Objetivo futuro: ¿La casa de tus sueños? ¿Un curso de cata de vinos? (Sí, yo también lo considero una inversión). El ahorro es el cimiento, el ladrillo, el corcho.
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Circunstancia inesperada: La vida es como una partida de mus. Nunca sabes qué cartas te tocarán. Que se te rompa el coche, que tu loro aprenda a insultar al cartero… El ahorro es tu comodín.
Pero ojo, ahorrar no es sinónimo de vivir como un monje trapense. Se trata de encontrar el equilibrio, de disfrutar el presente sin hipotecar el futuro. ¿Recuerdas aquella vez que me compré un sombrero ridículo con el dinero que debía ahorrar? No me arrepiento de nada. Bueno, casi.
Un truco: automatiza tus ahorros. Como ponerle el piloto automático a tu prosperidad. Configura transferencias automáticas a una cuenta de ahorros cada vez que cobres. Es como pagar una factura más, solo que a ti mismo.
Y si todo falla, siempre puedes echarle la culpa a la inflación. “Es que, con lo que suben los aguacates…”
¿Qué importancia tiene el ahorro en la escuela?
Vale, a ver… Ahorrar en la escuela es clave, ¿no? Pienso en mis sobrinos. Si ahorraran desde ya…
- Menos agobios cuando quieran estudiar algo.
- Más chances de curros guays.
Luego, ¿qué más? Es como plantar una semilla, ¡pero de futuro! Recuerdo cuando quise estudiar diseño gráfico, uff, si hubiera tenido algo ahorrado…
¿No es raro que no nos enseñen esto antes? Deberían, en plan:
- Trae un euro.
- Lo guardamos.
- ¡Mira, ya tienes un euro!
Así, poco a poco. Y lo de reducir el estrés… total.
IMPORTANCIA: Inversión futuro, menos estrés.
¿Cómo fue el origen del ahorro?
El ahorro: una semilla ancestral. Egipto, China, Incas… todos guardaban grano. Supervivencia, pura y simple. No era lujo, era necesidad.
Sacrificio presente, cosecha futura. Una ecuación básica, brutal. Su lógica, inamovible. Mi abuela, en su pueblo, igual. Siempre guardaba algo.
- Semillas.
- Recursos.
- Para la sequía. Para el invierno. Simple.
El ahorro hoy, una telaraña financiera. Complejo. Bancos, intereses, inflación… un juego perverso. Sin embargo, la base sigue ahí. Esa semilla.
Mi fondo de emergencia: 6 meses. Objetivo: 2024. No es mucho, lo sé. Suficiente para mantenerme. En silencio.
Apéndice: El auge de las criptomonedas ha modificado sustancialmente las estrategias de ahorro para muchos, introduciendo volatilidad e incertidumbre en un panorama ya complejo. La inversión en activos digitales, a pesar de su potencial, presenta riesgos significativos. Observo con escepticismo este nuevo paradigma. Este año, he re-evaluado mi propia cartera, recortando exposición en criptomonedas. El riesgo es demasiado alto. Prefiero la seguridad, aunque sea menos rentable.
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