¿Qué paga el inquilino y qué paga el propietario?

La Partida de Gastos: ¿Qué Corresponde al Propietario y al Inquilino?

Al firmar un contrato de alquiler, tanto propietario como inquilino adquieren responsabilidades económicas bien definidas. Si bien la transparencia es clave para evitar conflictos futuros, la ambigüedad en este aspecto puede generar disputas. Este artículo clarifica los gastos comunes, diferenciando con precisión lo que corresponde a cada parte.

Las responsabilidades del Propietario: El Mantenimiento Estructural y Comunitario

El propietario, como titular del inmueble, asume la carga de los gastos relacionados con el mantenimiento y conservación de la estructura y las zonas comunes. Esto incluye, pero no se limita a:

• Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI): Este impuesto municipal recae sobre la propiedad del inmueble y es responsabilidad exclusiva del propietario.
• Cuotas de la Comunidad de Propietarios: Si el inmueble forma parte de una comunidad, el propietario debe hacerse cargo del pago de las cuotas mensuales correspondientes al mantenimiento de zonas comunes (ascensor, jardín, piscina, etc.), así como de las derramas extraordinarias aprobadas en asamblea.
• Mantenimiento de las Instalaciones Principales: El propietario es responsable de mantener en buen estado las instalaciones fijas y esenciales para el uso del inmueble. Esto abarca reparaciones y sustituciones en caso de avería de la caldera central (si la hubiera), la red eléctrica principal, la instalación de agua general, etc. Es importante destacar que “buen estado” se refiere a la funcionalidad de la instalación, no a la actualización o modernización de la misma.

Las responsabilidades del Inquilino: Los Consumos Individuales

El inquilino, por su parte, es responsable del pago de todos los consumos individuales que se miden a través de contadores específicos. Esto implica:

• Agua: El consumo de agua del inmueble, medido por el contador individual.
• Electricidad: El consumo eléctrico, igualmente medido por un contador individual.
• Gas: Si el inmueble cuenta con suministro de gas natural, el inquilino asume el coste de su consumo individual.
• Servicios de Telecomunicaciones: Internet, telefonía fija y móvil son responsabilidad del inquilino. No obstante, es importante consultar el contrato de alquiler, pues algunas veces se incluyen servicios básicos como la conexión a internet.
• Reparaciones Menores: El inquilino generalmente asume la responsabilidad de las reparaciones menores derivadas del uso normal del inmueble, como la reparación de un grifo que gotea, la sustitución de una bombilla, o la reparación de un desperfecto en un electrodoméstico que sea de su propiedad. La delimitación precisa de “reparaciones menores” debe quedar claramente establecida en el contrato de alquiler.

La Clave: La Claridad Contractual

Para evitar malentendidos, es fundamental que el contrato de alquiler especifique con claridad las responsabilidades de cada parte en cuanto a los gastos. En caso de duda, es recomendable consultar con un profesional legal. Una redacción precisa del contrato evitará futuros conflictos y garantizará una relación fluida entre propietario e inquilino. La transparencia y la comunicación abierta son pilares fundamentales para una convivencia armoniosa.