¿Cuál es la piedra preciosa más cara del mundo?

¿Cuál es la piedra preciosa más cara del mundo? ¡Buf! Menuda pregunta… La verdad, siempre me ha fascinado este tema. ¿Quién no se ha quedado embobado mirando el brillo de una joya, imaginando su historia, su valor? Yo, desde luego, sí. Y para mí, aunque sé que hay otras gemas carísimas, la reina indiscutible es el diamante rojo.

¡Más de 900.000 euros! Casi nada… Es que me cuesta hasta escribirlo. Imagina: una piedrecita, más pequeña que la uña del meñique, ¡y vale una fortuna! Recuerdo una vez, viendo un documental, creo, mostraban uno… ¡era hipnótico! Rojo intenso, casi como una gota de sangre… Claro, la jadeíta también alcanza precios desorbitados; vi un collar en una subasta, ¡madre mía!, pero no sé… No me transmite lo mismo. El diamante rojo tiene algo… una magia especial. Esa rareza, esa perfección… Diría que es casi… ¿cómo decirlo?… místico.

Es que, ¿no te parece una locura? Pagar tanto por algo tan pequeño. Aunque, claro, si lo piensas, no es solo una piedra. Es un símbolo. De lujo, de poder, de… no sé… ¿eternidad, tal vez? Un tesoro, sí, eso es. Un verdadero tesoro. Como encontrar una aguja en un pajar… o una pepita de oro en un río. (Vale, igual me estoy emocionando demasiado, jeje). Pero es que a mí estas cosas me flipan. Y aunque nunca me pueda permitir ni acercarme a uno, me encanta soñar con ellos. ¿A quién no?