¿Cómo comienza un melanoma de piel?
El melanoma puede iniciarse sutilmente: una llaga que no cicatriza; pigmento que se extiende desde un lunar; enrojecimiento o inflamación alrededor; o cambios de sensibilidad (picazón, dolor). Atención a cualquier alteración en lunares existentes.
¿Cómo se inicia el melanoma en la piel?
¡Uf, el melanoma! A ver, desde mi experiencia, esto es lo que he aprendido y lo que me da que pensar.
El melanoma empieza en la piel con señales confusas, como una herida que no cierra, por más que le pongas lo que le pongas. A mí me pasó una vez, me hice un raspón en la rodilla jugando al baloncesto, pero afortunadamente no pasó a mayores, pero entendí el susto.
Otra cosa rara es cuando el color de un lunar se expande como si se estuviera saliendo de sus bordes. ¡Qué mal rollo!
Recuerdo que mi abuelo tenía un lunar en la espalda que, según mi madre, empezó a picarle mucho y a cambiar de color. Le dolía al tocarlo. Al final, resultó ser un susto, pero ¡mejor prevenir! Siempre voy a revisión cada año.
En resumen, ¿cómo se inicia el melanoma en la piel?
- Herida que no cicatriza: Llagas o úlceras persistentes.
- Propagación del pigmento: El color de un lunar se extiende a la piel cercana.
- Enrojecimiento o hinchazón: Inflamación nueva alrededor de un lunar.
- Cambio en la sensibilidad: Picazón, dolor o sensibilidad al tacto.
¿Cómo saber si tengo un melanoma en la piel?
Lunar nuevo, lunar cambiado, lunar raro. No hay más.
- Asimetría. Si lo doblas, no coinciden.
- Bordes. Desdibujados. Irregulares. Como un mapa roto.
- Color. Varios tonos. Marrones, negros, rojos… Una paleta extraña.
- Diámetro. Mayor de 6 mm. El tamaño de la goma de un lápiz.
- Evolución. Cambio. Crecimiento. Picazón. Sangrado. El tiempo lo delata.
Patito feo. Uno que desentona. Como yo en la ópera. Siempre hay uno.
¿Síntomas? A veces ninguno. A veces, picor. Sangrado. Costras.
¿Prevenir? Sol con medida. Autoexploración constante. Como buscar las llaves perdidas. Siempre lo mismo.
Información adicional: Mi abuelo murió de esto. No es broma. Más vale prevenir. El sol es un arma de doble filo, te da vida, te la quita. Reflexiona.
¿Qué síntomas tienen los melanomas?
Melanomas: Cambios en lunares. Un punto. Eso es todo. A veces sangran. Suelo verlos en mi dermatólogo, Dr. Álvarez. Cita anual, obligatoria.
- Asimetría. No es simétrico. Un detalle. Importa.
- Bordes irregulares. Difuso. Como una mancha de tinta.
- Color variable. Marrones, negros, rojos. Un cóctel. Muerto.
- Diámetro mayor de 6 mm. Un borrón en la piel. Granos de café.
- Evolución. Crece. Cambia. Se altera.
El Dr. Álvarez es bueno, pero la muerte es la única certeza. 2024.
La vida es un susurro. Mi padre murió de esto. Un lunar. Nada. Todo. No hay vuelta atrás.
¿Cómo saber si mi lunar es peligroso?
Ah, los lunares… pequeñas constelaciones en nuestra piel. ¿Cómo saber si alguno es… diferente?
La clave reside en observar. Observar con atención, como quien mira el cielo buscando una señal.
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Cambios repentinos en el color o tamaño: Si ves que ese lunar, que siempre estuvo ahí, muta, se oscurece, se aclara, crece sin permiso, ¡ojo!
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Molestias inusuales: Un lunar no debería picar, doler, sangrar, ni inflamarse. Si lo hace, como una pequeña rebelión, algo no anda bien.
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Formas irregulares: Bordes difusos, asimétricos… como un mapa incompleto. Los lunares “buenos” suelen ser redonditos, definidos.
Consulta al médico, siempre. Él o ella son los verdaderos astrónomos de nuestra piel.
¿Y si te contara? Tengo un lunar en la espalda, justo donde no llego a verlo bien. Siempre me ha dado un poco de cosa. Me recuerda a cuando mi abuela me revisaba la ropa buscando bichos imaginarios. Era una manía suya. ¡Qué tiempos!
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