¿Cómo empiezan a salir los hongos en la piel?

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Los hongos cutáneos surgen de un desequilibrio en la flora bacteriana de la piel, o por condiciones que facilitan su crecimiento, como el exceso de sudoración o la falta de higiene.
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Cómo se desarrollan las infecciones por hongos en la piel

Las infecciones por hongos en la piel, también conocidas como dermatofitosis, son causadas por hongos que prosperan en la capa externa de la piel. Si bien estos hongos pueden estar presentes en la piel sana, un desequilibrio en la flora bacteriana o ciertas condiciones ambientales pueden desencadenar su crecimiento excesivo, lo que lleva a una infección.

Factores desencadenantes de las infecciones por hongos en la piel

  • Desequilibrio de la flora bacteriana: La piel alberga una comunidad diversa de bacterias que ayudan a mantener un ambiente saludable. Cuando el equilibrio de estas bacterias se ve alterado, puede crear un entorno favorable para el crecimiento de hongos.
  • Exceso de sudoración: La humedad prolongada crea condiciones ideales para que los hongos prosperen. El sudor excesivo debido a la actividad física intensa, la ropa ajustada o las condiciones ambientales húmedas puede aumentar el riesgo de infecciones por hongos.
  • Falta de higiene: Una higiene deficiente permite que los hongos se acumulen en la superficie de la piel. No ducharse regularmente, usar ropa sucia o compartir artículos personales pueden contribuir al crecimiento de hongos.
  • Sistema inmunitario debilitado: Un sistema inmunitario comprometido no puede combatir eficazmente las infecciones fúngicas. Las personas con diabetes, VIH/SIDA o que reciben quimioterapia son más susceptibles a las infecciones por hongos.

Cómo se desarrollan las infecciones por hongos

Cuando se dan las condiciones adecuadas, los hongos comienzan a multiplicarse rápidamente en la superficie de la piel. Producen enzimas que descomponen la queratina, la proteína que forma la capa externa de la piel. Esta descomposición puede causar síntomas como:

  • Picazón
  • Ardor
  • Enrojecimiento
  • Hinchazón
  • Ampollas
  • Descamación

Si la infección no se trata, puede extenderse a áreas más grandes de la piel y causar complicaciones más graves. Es importante buscar atención médica si se sospecha una infección por hongos para recibir el tratamiento adecuado.