¿Cómo saber si una herida está infectada por dentro?

Cómo identificar una herida infectada por dentro

Las heridas, tanto si son superficiales como profundas, pueden infectarse si las bacterias u otros microorganismos entran en la zona lesionada. Detectar los signos de una infección interna es crucial para garantizar una recuperación adecuada y evitar complicaciones graves.

Signos de una herida infectada por dentro

Si bien algunas heridas sanan sin problemas, otras pueden desarrollar síntomas que indican una infección subyacente. Estos síntomas incluyen:

• Pus o secreción maloliente: La presencia de pus, un líquido espeso y amarillento o verdoso, es un signo revelador de infección.
• Fiebre: Una temperatura corporal elevada por encima de 38,3 °C puede indicar una infección generalizada.
• Escalofríos: Los escalofríos son a menudo un síntoma de una infección que se está extendiendo.
• Calor excesivo al tacto: La zona infectada puede sentirse notablemente más caliente que la piel circundante.
• Enrojecimiento excesivo: La piel alrededor de la herida puede enrojecerse y volverse sensible.
• Dolor intenso: La infección puede causar un dolor agudo y persistente que no se alivia con analgésicos.

Cuándo buscar atención médica

Si tu herida quirúrgica o cualquier otra herida muestra alguno de estos síntomas, es esencial buscar atención médica inmediata. Estos signos indican una posible infección interna que requiere tratamiento profesional.

Tratamiento para las heridas infectadas

El tratamiento para una herida infectada depende de la gravedad de la infección y del tipo de bacteria implicada. Las opciones de tratamiento pueden incluir:

• Antibióticos: Los antibióticos se utilizan para matar las bacterias y detener la propagación de la infección.
• Desbridamiento: Este procedimiento quirúrgico consiste en eliminar el tejido infectado de la herida.
• Drenaje: Se puede insertar un drenaje en la herida para eliminar el pus y los líquidos infectados.

Prevención de las infecciones de las heridas

Seguir prácticas de higiene adecuadas y cuidar adecuadamente las heridas puede ayudar a prevenir infecciones:

• Mantén la herida limpia y seca.
• Cámbiate el apósito regularmente.
• Evita tocar o manipular la herida sin lavarte las manos.
• Acude a revisiones médicas periódicas para controlar el progreso de la curación.

Al estar atento a los signos de una infección interna y buscar atención médica inmediata cuando sea necesario, puedes garantizar una recuperación más rápida y segura de las heridas.