¿Cómo saber si uno tiene la bacteria en el estómago?

La Sombra en tu Estómago: ¿Cómo Saber si Tienes Helicobacter pylori?

Un dolor sordo, una sensación de ardor que te roe por dentro, una acidez persistente que parece no ceder… Podrían ser muchas cosas, desde el estrés hasta una mala digestión. Pero, ¿podría ser algo más serio? En ocasiones, estos síntomas pueden ser la señal de que un intruso silencioso ha colonizado tu estómago: la bacteria Helicobacter pylori.

Esta bacteria, conocida por su capacidad de sobrevivir en el ácido ambiente estomacal, es una de las principales causas de úlceras pépticas y, en casos más graves, puede aumentar el riesgo de cáncer de estómago. Por eso, es crucial estar atento a las señales que tu cuerpo te envía y buscar ayuda médica si sospechas una posible infección.

Presta Atención a las Alarmas:

Si bien muchas personas infectadas con Helicobacter pylori pueden no experimentar síntomas, para otros la presencia de la bacteria se manifiesta de manera clara. Aquí te presentamos algunos indicadores que deberían alertarte:

• Dolor Abdominal Tipo Ardor: Este es quizás el síntoma más común. Se describe como una sensación de quemazón o dolor corrosivo en la parte superior del abdomen. Lo característico es que empeora al estar en ayunas, cuando el estómago está vacío y el ácido gástrico entra en contacto directo con la mucosa inflamada o ulcerada. Puede que sientas alivio temporal al comer, pero luego el dolor regresa.

• Náuseas y Vómitos: La inflamación causada por la bacteria puede irritar el revestimiento del estómago, provocando sensación de náuseas, e incluso vómitos ocasionales.

• Falta de Apetito: La incomodidad y el malestar general asociados a la infección pueden disminuir tu apetito. La sensación de estar “lleno” rápidamente, incluso después de comer poco, también es común.

• Eructos Frecuentes e Hinchazón: La bacteria puede alterar la digestión normal, llevando a una mayor producción de gases y, por consiguiente, a eructos frecuentes y sensación de hinchazón abdominal.

• Pérdida de Peso Inexplicable: Si notas que estás perdiendo peso sin haber cambiado tu dieta o rutina de ejercicios, y además experimentas alguno de los síntomas mencionados anteriormente, es importante consultar a tu médico. La pérdida de apetito y la alteración en la absorción de nutrientes pueden contribuir a esta pérdida de peso.

¿Qué Debes Hacer si Sospechas la Presencia de la Bacteria?

Si identificas uno o varios de estos síntomas, no te automediques. Es fundamental consultar a un médico para obtener un diagnóstico preciso. Existen diversas pruebas que pueden confirmar la presencia de Helicobacter pylori, como:

• Prueba del aliento con urea: Esta prueba no invasiva mide la cantidad de dióxido de carbono marcado que se exhala después de ingerir una solución que contiene urea. Si la bacteria está presente, descompondrá la urea y liberará el dióxido de carbono marcado.
• Análisis de sangre: Detecta la presencia de anticuerpos contra Helicobacter pylori en la sangre.
• Análisis de heces: Busca la presencia de antígenos de Helicobacter pylori en las heces.
• Endoscopia: Permite visualizar directamente el revestimiento del estómago y tomar muestras (biopsias) para analizar si hay presencia de la bacteria y evaluar el daño causado.

El Tratamiento es la Clave

Una vez confirmado el diagnóstico, el tratamiento generalmente consiste en una combinación de antibióticos y medicamentos que reducen la producción de ácido estomacal. Es crucial seguir las indicaciones médicas al pie de la letra para erradicar la bacteria por completo y prevenir complicaciones a largo plazo.

No ignores las señales de tu cuerpo. La detección temprana y el tratamiento adecuado de la infección por Helicobacter pylori pueden marcar la diferencia en tu salud digestiva y bienestar general. Consulta a tu médico ante cualquier sospecha y toma el control de tu salud.