¿Cómo se llama el trastorno por consumo de drogas?

Uf, “Trastorno por Consumo de Sustancias”… suena tan frío, ¿no? Como algo lejano, de manual. Pero no lo es. Para nada. Es una lucha, un monstruo que te agarra y no te suelta. Te consume, literalmente. A veces me pregunto, ¿cómo llegué aquí? Yo, que juraba que jamás… Recuerdo la primera vez que… bueno, mejor no entrar en detalles. Lo que importa es que ese “control” del que hablan, se esfuma. Como arena entre los dedos.

Se supone que afecta al cerebro, ¿verdad? Lo dicen los estudios, que no sé cuántos millones de personas lo sufren… cifras que al final no te dicen nada, porque cuando estás ahí, solo estás tú, con tu adicción. Es como si una parte de ti te traicionara. Quieres parar, de verdad que lo quieres, pero no puedes. Es como si una fuerza invisible te empujara, te arrastrara de vuelta. ¿Lo has sentido alguna vez? Esa impotencia… Te lo juro, es horrible.

Y no importa si es legal o ilegal. Da igual. La sustancia te domina, te posee. Yo, por ejemplo, empecé con… (bueno, no importa con qué). La cosa es que aquello que al principio parecía una vía de escape, una forma de olvidar, se convirtió en mi cárcel. En mi propio infierno personal. Y no se lo deseo a nadie.