¿Cuáles son los macronutrientes según la OMS?

Más allá de las Calóricas: Descifrando los Macronutrientes según la Perspectiva de la OMS

La Organización Mundial de la Salud (OMS) no ofrece una lista exhaustiva y explícita de “macronutrientes” como categoría única. Sin embargo, sus recomendaciones dietéticas implícitamente definen cuáles son los componentes esenciales que, en grandes cantidades, conforman esta categoría fundamental para una nutrición adecuada. En lugar de una definición formal, la OMS aborda los macronutrientes a través de sus directrices sobre el consumo de diferentes grupos de alimentos y la composición nutricional ideal de la dieta.

Interpretando la información de la OMS, podemos identificar los siguientes componentes como macronutrientes clave, indispensables para el funcionamiento óptimo del organismo:

• Carbohidratos: La OMS enfatiza la importancia de los carbohidratos complejos, presentes en cereales integrales, legumbres, frutas y verduras, como fuente principal de energía. Se desaconsejan los azúcares simples en exceso, recalcando su impacto negativo en la salud metabólica. La proporción de carbohidratos en la dieta, según las recomendaciones de la OMS, debe ser significativa pero equilibrada con otros macronutrientes.

• Proteínas: La OMS destaca la necesidad de un aporte proteico adecuado para el crecimiento, la reparación tisular y el mantenimiento de las funciones corporales. Si bien no especifica una lista de “macronutrientes”, la implicación es clara: las proteínas, con sus aminoácidos esenciales (que el cuerpo no puede sintetizar por sí mismo y deben ser obtenidos de la alimentación), son fundamentales. La OMS promueve el consumo de proteínas de fuentes diversas, incluyendo vegetales, legumbres y carnes magras.

• Lípidos (Grasas): La OMS reconoce la necesidad de grasas en la dieta, pero con una fuerte advertencia sobre la calidad de las mismas. Se enfatiza la importancia de las grasas insaturadas (monoinsaturadas y poliinsaturadas), incluyendo los ácidos grasos esenciales como el omega-3 y omega-6, presentes en pescados grasos, nueces, semillas y aceites vegetales. Se recomienda limitar el consumo de grasas saturadas y grasas trans, asociadas a un mayor riesgo de enfermedades crónicas.

• Agua: Aunque no siempre se incluye explícitamente en la lista de macronutrientes, el agua es esencial para todas las funciones biológicas y, por su volumen de consumo diario, se considera un macronutriente fundamental. La OMS subraya la importancia de la hidratación adecuada para mantener la salud y el bienestar.

• Macrominerales: Si bien la OMS no utiliza el término “macronutrientes” de manera global, sus recomendaciones sobre la ingesta diaria de minerales como calcio, fósforo, magnesio, sodio, potasio y cloro, son implícitamente una validación de su rol como macronutrientes. Estos minerales son necesarios en cantidades significativas para diversas funciones fisiológicas y su deficiencia puede tener consecuencias negativas para la salud.

En resumen, la perspectiva de la OMS sobre los macronutrientes se infiere a través de sus recomendaciones dietéticas y su enfoque en la calidad nutricional de los alimentos. La organización se centra en la importancia de una dieta equilibrada y variada, rica en carbohidratos complejos, proteínas de calidad, grasas saludables y abundante agua, junto con una adecuada ingesta de macrominerales, para lograr una óptima salud y bienestar. No se trata de una lista exhaustiva y formal de “macronutrientes”, sino de una comprensión implícita de los componentes necesarios en grandes cantidades para el funcionamiento del organismo.

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