¿Cuándo la diarrea es peligrosa?

¿Cuándo la diarrea se convierte en una amenaza?

La diarrea, caracterizada por heces acuosas y frecuentes, es una condición común que suele ser benigna y autolimitada. Sin embargo, en ciertos casos puede transformarse en una situación grave que requiere atención médica inmediata. ¿Cómo saber cuándo la diarrea deja de ser un simple malestar y se convierte en una amenaza?

El factor clave: la deshidratación. La diarrea implica una pérdida considerable de líquidos y electrolitos esenciales para el correcto funcionamiento del cuerpo.

Señales de alarma:

• Número de deposiciones: Se considera diarrea grave cuando se presentan más de diez deposiciones líquidas en 24 horas, evidenciando una significativa pérdida de fluidos. Una diarrea moderada implica un número menor, pero superior a unas pocas evacuaciones diarreicas en el mismo periodo.
• Duración: La diarrea que persiste más de dos días debe ser motivo de preocupación, especialmente si se acompaña de otros síntomas.
• Síntomas acompañantes: La presencia de fiebre alta, sangre o mucosidad en las heces, dolor abdominal intenso, vómitos, mareos, debilidad o deshidratación son señales de alerta que requieren atención médica inmediata.
• Grupos de riesgo: Los niños pequeños, los ancianos, las personas con sistemas inmunológicos débiles y las embarazadas son particularmente susceptibles a las complicaciones de la diarrea.

Cómo identificar la deshidratación:

• Boca seca y lengua pegajosa.
• Ojos hundidos.
• Piel seca y arrugada.
• Poca orina.
• Fatiga y somnolencia.
• Irritabilidad.
• Pérdida de peso.

¿Qué hacer en caso de diarrea grave?

• Acudir al médico inmediatamente.
• Beber líquidos abundantes para rehidratarse. Las soluciones de rehidratación oral (SRO) como Pedialyte o Oralit son muy efectivas.
• Evitar alimentos sólidos hasta que la diarrea ceda.
• Seguir las recomendaciones del médico.

Recuerda: la diarrea, en la mayoría de los casos, se debe a infecciones virales y se resuelve por sí sola en pocos días. Sin embargo, la deshidratación puede ser una complicación grave, especialmente en niños pequeños y ancianos. Si experimentas diarrea intensa o persistente, no dudes en consultar a un profesional de la salud.