¿Cuando una mujer tiene el periodo atrae más a los hombres.?

El Mito del Deseo Menstrual: ¿Atrae la menstruación a los hombres?

La creencia popular a menudo asocia la menstruación con un aumento del atractivo femenino para los hombres. Sin embargo, esta idea, arraigada en mitos y posiblemente en una interpretación errónea de ciertas señales corporales, carece de fundamento científico sólido. La realidad es mucho más compleja y fascinante que un simple “sí” o “no”.

El ciclo menstrual, un proceso fisiológico fundamental para la reproducción humana, implica fluctuaciones hormonales significativas que afectan diversos aspectos de la salud femenina, incluyendo el deseo sexual. Es cierto que estas fluctuaciones hormonales influyen en la libido, pero el pico de deseo sexual, y por ende, la mayor probabilidad de atracción física, no coincide con la menstruación, sino con la ovulación.

Durante la ovulación, cuando la mujer es fértil, los niveles de estrógeno y testosterona alcanzan su punto máximo. Estas hormonas influyen directamente en la libido, aumentando el deseo sexual y, en consecuencia, la percepción de atractivo por parte de los hombres (y de la propia mujer). En este momento del ciclo, se produce un cambio sutil en la composición del olor corporal, detectado inconscientemente por los hombres y asociado con una mayor fertilidad. Este aspecto, estudiado por la ciencia, es una posible explicación del origen de algunos mitos en torno a la atracción durante el ciclo menstrual. Se confunde, quizás, la atracción inherente a la fertilidad con la menstruación misma.

Por el contrario, durante la menstruación, los niveles hormonales son considerablemente más bajos. El cuerpo se encuentra en un proceso de eliminación, y el malestar físico asociado a la menstruación –calambres, dolor, fatiga– suele afectar negativamente el deseo sexual en la mayoría de las mujeres. Por lo tanto, la idea de un aumento de atracción durante este período es un mito sin respaldo científico.

En conclusión, si bien el ciclo menstrual influye en la libido femenina y, por consiguiente, en la percepción de su atractivo, la menstruación en sí misma no incrementa la atracción hacia los hombres. El pico de deseo sexual y la mayor probabilidad de atraer la atención masculina se asocian directamente con la ovulación, el periodo de máxima fertilidad, no con la menstruación. Es importante desmitificar estas creencias populares, promoviendo una comprensión más precisa y científica del cuerpo femenino y su compleja relación con el deseo sexual.