¿Cuánto es lo máximo que aguanta un humano sin comer?

El límite de la inanición: ¿Cuánto tiempo puede sobrevivir un humano sin comer?

La pregunta de cuánto tiempo puede un ser humano sobrevivir sin ingerir alimentos es una cuestión compleja, sin una respuesta única y definitiva. A diferencia de la falta de agua, que conlleva una muerte mucho más rápida, la inanición es un proceso gradual y devastador que depende de una intrincada interacción de factores individuales y ambientales. No se trata simplemente de un conteo regresivo hasta el fallecimiento; es un descenso hacia el fallo orgánico, un proceso que varía considerablemente de persona a persona.

Mientras que algunos afirman que un ser humano puede sobrevivir hasta 8 semanas sin comida, esta afirmación necesita matización. La cifra de seis a ocho semanas, a menudo citada, se refiere a un escenario idealizado, con acceso a agua limpia y en condiciones de reposo relativo, donde el cuerpo puede minimizar el gasto energético. Este escenario no refleja la realidad de la mayoría de las situaciones de supervivencia.

La supervivencia sin alimento depende crucialmente de varios factores:

• Reservas de grasa corporal: Las personas con mayor cantidad de tejido adiposo poseen mayores reservas energéticas, extendiendo su capacidad de supervivencia. Una persona obesa, por ejemplo, podría aguantar considerablemente más tiempo que una persona delgada.

• Masa muscular: El músculo también sirve como fuente de energía, aunque su consumo es más rápido y con consecuencias más graves a largo plazo para la salud. Una persona con mayor masa muscular podría inicialmente resistir más tiempo, pero a costa de un debilitamiento físico acelerado.

• Metabolismo: Un metabolismo más lento permitirá una mayor duración de la supervivencia, mientras que un metabolismo rápido agotará las reservas energéticas con mayor rapidez.

• Estado de salud: Enfermedades preexistentes, deficiencias nutricionales o infecciones debilitantes reducirán drásticamente el tiempo de supervivencia. Una persona con un sistema inmunológico comprometido será mucho más vulnerable a las consecuencias de la inanición.

• Actividad física: El ejercicio físico aumenta la demanda energética del cuerpo. Cualquier actividad, más allá de lo mínimo para el mantenimiento vital, reducirá significativamente el tiempo de supervivencia sin alimentos.

• Temperatura ambiente: Las temperaturas extremas, tanto frías como cálidas, incrementan el gasto energético del cuerpo, acortando el periodo de supervivencia.

En resumen, si bien la cifra de seis a ocho semanas se utiliza como una estimación general en condiciones ideales, la realidad es mucho más compleja. La supervivencia sin comida es un proceso individual, determinado por una intrincada interacción de factores biológicos, ambientales y de salud. La ausencia de alimento no es simplemente una cuestión de tiempo, sino de un deterioro progresivo del organismo que puede culminar en un fallo multiorgánico. Es crucial destacar la importancia de la hidratación durante la inanición, ya que la deshidratación acelera significativamente el proceso de deterioro y reduce considerablemente las posibilidades de supervivencia.