¿Dónde está el agua en el cuerpo?

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El cuerpo humano está compuesto principalmente de agua, un 70% aproximadamente. Esta se distribuye entre el interior de las células (intracelular) y fuera de ellas (extracelular), circulando en la sangre y entre los tejidos.
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Dónde se encuentra el agua en el cuerpo

El cuerpo humano está compuesto principalmente por agua, aproximadamente un 70%. Esta agua se distribuye entre el interior de las células (intracelular) y fuera de ellas (extracelular), circulando en la sangre y entre los tejidos.

Distribución intracelular

Aproximadamente dos tercios del agua corporal se encuentra dentro de las células. Este líquido intracelular contiene electrolitos esenciales, como sodio, potasio y magnesio, que son cruciales para muchas funciones corporales, como la contracción muscular y la transmisión nerviosa.

Distribución extracelular

El tercio restante del agua corporal se encuentra fuera de las células. Se divide en dos compartimentos principales:

  • Líquido intersticial: Este líquido rodea las células y llena los espacios entre ellas. Contiene electrolitos, nutrientes, hormonas y productos de desecho.
  • Plasma sanguíneo: Este componente líquido de la sangre transporta nutrientes, oxígeno, hormonas y productos de desecho por todo el cuerpo. Aproximadamente el 8% del agua corporal total se encuentra en el plasma sanguíneo.

Distribución del agua por edad y sexo

La distribución del agua en el cuerpo varía según la edad y el sexo. En general, los hombres tienen un mayor porcentaje de agua corporal que las mujeres, y los niños tienen un mayor porcentaje de agua corporal que los adultos.

Importancia del agua para la salud

El agua es esencial para muchos procesos corporales, como:

  • Regulación de la temperatura corporal
  • Transporte de nutrientes y oxígeno
  • Eliminación de productos de desecho
  • Lubricación de articulaciones y tejidos
  • Amortiguación de órganos y tejidos

La deshidratación, una condición causada por la pérdida de demasiada agua, puede provocar una amplia gama de problemas de salud, desde fatiga hasta daños graves en los órganos. Por lo tanto, es crucial mantener una hidratación adecuada bebiendo suficientes líquidos a lo largo del día.