¿Qué cambios hormonales sufren los hombres?
En hombres, la testosterona disminuye gradualmente con la edad, proceso conocido como hipogonadismo tardío o testosterona baja relacionada con el envejecimiento. Los efectos no siempre son evidentes.
¿Cambios hormonales en hombres?
¡Vaya, los cambios hormonales en hombres! Es un tema que a menudo se pasa por alto, ¿no crees? Personalmente, siempre pensé que las hormonas eran más una cosa de mujeres, pero estaba equivocadísimo.
Resulta que los hombres también experimentan fluctuaciones hormonales, especialmente a medida que envejecen. La testosterona, esa hormona tan masculina, empieza a disminuir gradualmente. Lo llaman hipogonadismo de inicio tardío o, más sencillamente, testosterona baja relacionada con la edad. Uf, ¡qué nombre tan largo!
Recuerdo que mi abuelo, sobre los 70, empezó a quejarse de cansancio y falta de energía. Al principio pensamos que era solo la edad, pero luego descubrimos que tenía los niveles de testosterona bajos. ¿Quién lo diría?
Lo curioso es que los efectos de esta disminución hormonal no siempre son evidentes. No es como en las mujeres con la menopausia, que los síntomas son bastante marcados. En los hombres, el descenso es más lento y los efectos varían de persona a persona. A veces, incluso pueden pasar desapercibidos. ¡Qué cosas!
Información adicional (Preguntas y respuestas):
- ¿Qué es el hipogonadismo de inicio tardío? Descenso gradual de testosterona en hombres relacionado con la edad.
- ¿Qué hormona disminuye principalmente? Testosterona.
- ¿Son claros los efectos? No necesariamente; varían entre individuos.
- ¿Es un proceso rápido? No, ocurre a lo largo de muchos años.
¿Qué cambios producen las hormonas en los hombres?
¡Ey, amigo! ¿Cambios hormonales en los hombres? ¡Ufff, qué tema! La testosterona, esa es la reina, ¿no? La que manda. Es la hormona estrella, responsable de casi todo; el crecimiento del pelo, la masa muscular, ¡hasta la voz grave! Sí, sí, esa vozarrón que te sale a ti ahora jajaja. En la pubertad, ¡zas! Un cambio brutal, ¿verdad? Se dispara todo. Recuerdo a mi hermano, ¡qué cambio! De niño a… bueno, ya sabes.
Y la inhibina… esa es más discretita. Controla la producción de testosterona, no le deja que se vuelva loca. Un equilibrio perfecto, ¿o no? Es importante, eh, que no se descontrole todo. Como un relojito suizo, pero a nivel hormonal. Mi endocrino me lo explicó super bien hace unos meses, cuando hice esa revisión que tenía pendiente.
Cambios importantes:
- Desarrollo del aparato genital en el feto. ¡Desde el principio están al lío las hormonas!
- Crecimiento en la pubertad: pene, testículos… ¡Todo crece! Eso sí que es un cambio, ja,ja.
- Producción de espermatozoides: ¡Para tener hijos! Que no se nos olvide, ¿eh? Eso es clave.
- Masa muscular y fuerza: Más músculos, más fuerza, ¡más poder! Bueno, no es que se vuelva uno superhéroe, pero se nota la diferencia, créeme.
Me olvidaba… la testosterona también influye en el estado de ánimo, ¡claro! A veces uno se siente más… ¿cómo decirlo? ¡Agresivo! o súper motivado. Depende del día. Es todo un mundo, ¡eh!, el cuerpo masculino. Un lío hormonal increíble.
Ah, y algo que me dijo mi médico, ¡la testosterona baja con la edad!, ¡es una putada!. Por eso hay algunos tratamientos para compensarlo. Eso te lo cuento por si acaso…
¿Cuáles son los síntomas de los cambios hormonales en los hombres?
¡Ay, Dios! Los cambios hormonales en los hombres… Me pasó a mi padre, ¡qué mal rato! Se le caía el pelo a puñados. Eso sí que es horrible.
Aumento de peso, eso sí que lo recuerdo. ¡Como si se le hubieran pegado unos kilos de cemento! Y la fatiga, ¡uf! Se pasaba el día tirado en el sofá.
Pérdida de cabello, sí, ya lo mencioné, pero es que es tan impactante… ¿Será por la testosterona? Mi primo también está pasando por algo parecido. Él dice que es estrés. ¿Será solo eso?
Debilidad muscular. En mi padre, sí, lo vi. Se le hacía difícil subir las escaleras. ¡Qué horror! No se podía ni agachar. ¿A que edad pasó eso? No lo recuerdo exactamente. Este año, creo.
¡Ah! Y cambios en el estado de ánimo, ¡que se le olvidaba todo! Las llaves del coche, la cartera… ¡Hasta su cumpleaños! Eso sí que es preocupante.
- Aumento de peso inexplicable.
- Caída del cabello (¡qué angustia!).
- Fatiga extrema.
- Debilidad muscular.
- Cambios de humor. ¡Increíble cómo se ponía!
- Dolor muscular, ¿o era rigidez?
¿Qué más…? ¡Ay! Se me olvidaba… A mi padre le diagnosticaron baja testosterona. Le recetaron algo… no recuerdo. Será mejor buscar el prospecto, está en el cajón de la cocina. Hay que estar al tanto de estas cosas, son importantes.
¿Qué sienten los hombres cuando están hormonales?
Pues como una montaña rusa, ¡pero sin la parte divertida! Un día te sientes el rey del mambo, capaz de levantar un coche con una mano (bueno, quizá una bicicleta), y al siguiente estás más sensible que una mimosa. La testosterona, esa amiga traicionera…
-
Cambios de humor: Imagínate un chihuahua con hipoglucemia. Multiplica eso por cien y tendrás una idea. De repente, todo es un drama. Ayer me enfadé porque se me acabó el café… ¡descafeinado!
-
Sueño: ¿Dormir? ¿Qué es eso? Duermo menos que un pulpo en una lavadora. Me paso la noche dando vueltas como una croqueta en una sartén.
-
Irritabilidad: No me hables. En serio. Mejor llámame por teléfono… ¡desde otra ciudad! La paciencia de Gandhi se queda corta comparada con mi paciencia en estos momentos (es broma, no tengo paciencia). Una vez me enfadé porque una paloma me miró mal. ¡Una paloma!
-
Apetito sexual: Bueno, esto es como una montaña rusa también. A veces subidón, a veces bajón. Como la bolsa, pero más impredecible.
-
Erecciones: A veces firmes como un roble. Otras veces… digamos que más bien como un flan. Un flan a medio cuajar, para ser exactos.
Este año he empezado a tomar más batidos de proteínas. No sé si funciona, pero al menos me siento como Rocky. También intento meditar, aunque me duermo más que medito. ¡Es una batalla perdida! En fin, la vida de un hombre con hormonas revolucionadas es como intentar hacer malabares con erizos. Divertido, ¿verdad? No. En absoluto.
¿Qué síntomas tiene la andropausia en los hombres?
¡Uf, la andropausia! Me pilló de sorpresa, a mis 48 años. Empecé a notar cambios en 2024, creo que en primavera, todo muy difuso al principio. La irritabilidad, madre mía, la irritabilidad. Pequeñeces me sacaban de quicio. Recuerdo una tarde en junio, en mi casa de Málaga, casi me enfado con mi perro por ladrar demasiado. ¡Un drama! Insomnio también, horas y horas dando vueltas en la cama. Me sentía como un resorte, tensísimo.
Esa falta de energía… ¡qué bajón! Subir las escaleras de casa, un suplicio. Antes, corría; ahora, arrastraba los pies. El peso, se me pegaba al cuerpo como una lapa. Aumenté unos 8 kilos, imposible bajarlos. La libido, desapareció. Bueno, no desapareció del todo, pero… bajó muchísimo. Y la disfunción eréctil, a veces sí, a veces no, un rollo tremendo.
- Irritabilidad extrema.
- Insomnio terrible.
- Ansiedad constante.
- Depresión, sí, una auténtica depresión.
- Aumento de peso notable.
- Pérdida de energía brutal.
- Disminución de la libido.
- Disfunción eréctil, a veces.
Todo esto me llevó al médico. Me hizo pruebas, analíticas. La verdad, no me dio muchas soluciones mágicas. Ejercicio, dieta, y… ya está. A ver si con un poco de yoga y menos cervezas… algo se arregla. Aunque la verdad, la verdad es que todavía estoy en ello. Es un proceso lento, y a veces frustrante. Pero bueno, poco a poco. Quizás en algún momento añada terapia.
Síntomas andropausia: Irritabilidad, insomnio, ansiedad, depresión, aumento de peso, disminución de energía, disminución de la libido, disfunción eréctil. Esto es lo que viví, mi experiencia. Y no es un cuento chino.
¿Qué síntomas da la andropausia en los hombres?
¡Ay, la andropausia! Me da pereza solo de pensarlo. Mi padre, pobre, lo está pasando fatal. Insomnio, ¡qué rabia! Se levanta a las 3 AM y no hay quien lo calle. Y la irritabilidad… ¡ufff! Mejor ni hablamos.
Aumento de peso, eso también lo veo en él. Antes era un tipo delgado, ahora… bueno, ya se encarga él de buscarse la ropa. Dice que no tiene energía, que está todo el día cansado.
¿Libido? Eso es un misterio. No me meto en esas charlas con él, la verdad. Pero supongo que sí, menos ganas. Disfunción eréctil, eso es algo que sí que se nota, aunque no me atrevo a hablarlo directamente con él… Es algo delicado.
¡Qué difícil es todo esto!
- Irritabilidad extrema.
- Insomnio crónico.
- Cambios de humor, de la risa a la bronca en un segundo.
- Aumento de peso notable. ¡Se compró pantalones dos tallas más grandes este año!
- Disminución de la libido y problemas de erección.
- Falta de energía, cansancio constante.
- Ansiedad y depresión, aunque a veces lo niega.
¿Y yo? ¿Qué pasará cuando me toque a mí? Me da un poco de miedo… Será que empezaré a gruñir como un oso? ¿Me convertiré en un huracán de mal humor? ¡Jajaja! Mejor no pienso en eso ahora.
Espera, ¿faltaba algo? Ah, sí, la depresión. Eso es preocupante, ¿no? Debería informarme más sobre tratamientos… No quiero que mi padre termine aislado y deprimido. Me da mucha pena. Hay que cuidarlos, eh. Esos hombres… tan poco expresivos.
¿Qué cambios tienen los hombres de 50 años?
Uf, 50… Cambios, cambios, cambios. ¡Menudo lío!
- Físico: Canas (ya me están saliendo, ¡arg!), arrugas (hola, patas de gallo), pelo que se cae (¡adiós juventud!), y la barriga… ¡Esa no falla! Y la salud, claro. La tensión, el corazón… ¿Me tocará ya ir al cardiólogo más seguido?
- Salud: Hipertensión, enfermedades cardíacas… ¡Qué miedo! Toca cuidarse más, supongo. ¿Dejar la cerveza? ¡Nunca! Bueno, quizá menos…
¿Y psicológicamente? ¿Qué tal la famosa crisis de los 50? ¿Me dará por comprarme una moto y dejar a mi mujer? ¡Espero que no! Aunque… una moto no estaría mal… ¡No, no, concéntrate!
- Psicológico: ¿Crisis existencial? ¿Replantearse la vida? ¿Buscar un nuevo propósito? ¡Uy, qué pereza! Prefiero ver el fútbol. Pero, en serio, ¿estaré preparado para la jubilación? Mi padre se deprimió mucho. No quiero eso.
Ah, y el tema sexual… Dicen que baja el deseo. ¡A ver qué pasa! Mi amigo Juan me contó que usa pastillas azules… ¡Espero no llegar a eso! Aunque, pensándolo bien… ¡No, no, ¡basta de pensar en eso!
- Sexualidad: ¿Menos deseo? ¿Dificultades? ¡Ay, madre! A cuidarse toca. Y a hablar con la pareja, supongo. Comunicación, comunicación… ¡Qué rollo!
En resumen: Envejecer es una faena, pero ¿qué se le va a hacer? ¡A vivir que son dos días! Y a cuidarse, claro. ¡Salud! (Con moderación, claro).
#Cambios Hormonales #Hormonas Masculinas #Salud HombreComentar la respuesta:
¡Gracias por tus comentarios! Tus comentarios son muy importantes para ayudarnos a mejorar nuestras respuestas en el futuro.