¿Qué enfermedades se notan en las uñas?

El espejo de la salud: Lo que tus uñas dicen sobre tu bienestar

Nuestras uñas, a menudo ignoradas en la rutina de autocuidado, actúan como un fascinante espejo que refleja el estado de nuestra salud interna. Más allá de su función estética, las alteraciones en su apariencia pueden ser señales tempranas de diversas enfermedades, requiriendo una evaluación médica para un diagnóstico certero y tratamiento oportuno. No se trata simplemente de una cuestión estética; cambios en la forma, color, textura y crecimiento de las uñas pueden indicar problemas subyacentes que requieren atención.

Mientras que algunas alteraciones son superficiales y fácilmente tratables, otras pueden señalar enfermedades sistémicas más complejas. Analicemos algunas de las enfermedades que se manifiestan a través de cambios en las uñas:

1. Onicomicosis (Infecciones por hongos): Esta es la afección más común que afecta las uñas. Se manifiesta con engrosamiento, decoloración (amarilla, blanquecina o verdosa), fragilidad y descamación de la uña. El hongo puede penetrar la placa ungueal, deformándola y haciendo que se desprenda. El diagnóstico se realiza mediante examen clínico y, en ocasiones, pruebas de laboratorio para identificar el tipo de hongo.

2. Psoriasis ungueal: La psoriasis, una enfermedad autoinmune, puede afectar las uñas, causando depresiones puntiformes (onicoatrosis), decoloración amarillenta, engrosamiento, descamación y separación de la uña del lecho ungueal (onicólisis). El tratamiento se centra en controlar la inflamación de la psoriasis y puede incluir cremas tópicas, fototerapia o medicamentos sistémicos.

3. Uñas encarnadas (onicocriptosis): Esta dolorosa afección ocurre cuando el borde de la uña se clava en la piel circundante, causando inflamación, enrojecimiento y, en casos severos, infección. Suele afectar el dedo gordo del pie y está relacionada con el corte incorrecto de las uñas, calzado inadecuado o malformaciones ungueales.

4. Fragilidad excesiva o uñas quebradizas (onicosquistosis): Las uñas quebradizas y que se rompen con facilidad pueden ser un síntoma de diversas causas, incluyendo deficiencias nutricionales (como la falta de biotina, hierro o zinc), hipotiroidismo, dermatitis atópica o el uso excesivo de detergentes y productos químicos.

5. Onicofagia (mordisqueo compulsivo de uñas): Aunque no se considera una enfermedad en sí misma, la onicofagia es un hábito que daña gravemente las uñas, causando inflamación, infección e incluso deformidades permanentes. Se relaciona con el estrés, la ansiedad y otros trastornos emocionales.

6. Líneas de Beau: Son surcos transversales que aparecen en la uña como consecuencia de un trastorno grave que afecta temporalmente el crecimiento ungueal. Pueden ser causadas por enfermedades como la fiebre alta, la desnutrición grave, una cirugía mayor o un trauma.

7. Leuconiquia: Aparición de manchas blancas en las uñas. Si son puntuales y de pequeño tamaño, suele ser benigno y relacionado con pequeños traumatismos. Si son extensas o cambian de aspecto, puede ser indicativo de diversas patologías.

Es fundamental recordar que esta información es solo orientativa. Ante cualquier cambio significativo en la apariencia de sus uñas, es crucial consultar a un médico o dermatólogo para un diagnóstico preciso y un plan de tratamiento adecuado. No automedique, ya que un tratamiento incorrecto puede empeorar la situación. Sus uñas son una ventana a su salud; preste atención a los mensajes que le envían.

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