¿Qué es bueno para curar una herida con infección?

Vale, a ver… ¿Qué se puede hacer cuando una herida se pone fea, de esas que te da miedo mirar de lo infectada que está? Uf, a todos nos ha pasado, ¿verdad?

Cuando una herida se infecta: ¡Socorro!

Bueno, lo primero, y esto es súper importante, no te hagas el/la valiente. Ve al médico. En serio. No te pongas a inventar remedios caseros si ves que la cosa va a más. ¿Por qué te digo esto? Porque mi abuela, que en paz descanse, era de “ponle saliva y ya” para todo, ¡y una vez casi pierde un dedo! Así que, con la salud, mejor no jugársela.

El médico, probablemente, te recetará cositas como:

• Antibióticos: Aquí es donde entran los nombres raros, ¿verdad? Amoxicilina, amoxicilina con clavulánico (¡suena a poción mágica!), clindamicina… Dependerá de la gravedad, supongo.
• Analgésicos/Antiinflamatorios: Porque, a ver, si te duele, ¡te duele! Y si está inflamado, peor aún. Yo soy muy de ibuprofeno, para qué mentirte, pero el médico sabrá mejor qué te conviene.

Ahora, lo que me da un poco de escalofríos…

• Casos Graves: Aquí es donde la cosa se pone seria. Antibióticos por vena (¡ouch!) o, incluso, cirugía. Suena feo, lo sé, pero a veces no hay otra. Piensa que es mejor eso que perder un miembro, ¿no crees?

Y luego, claro, están las curas locales. Me acuerdo que una vez, con una quemadura tonta, la enfermera me decía “limpia bien, con agua y jabón neutro, y luego pomada”. ¿Será igual para una herida infectada? Imagino que el médico te dirá qué hacer exactamente.

En fin, resumiendo: no te la juegues, ve al médico, sigue sus instrucciones al pie de la letra, y a curarse toca. Y, por cierto, ¡mucha paciencia! Que las heridas tardan en sanar, lo sé por experiencia. ¡Ánimo!