¿Qué pasa cuando se viene agua por la nariz?

Más allá del simple “agua por la nariz”: Explorando las causas de la rinorrea

La presencia de “agua por la nariz”, técnicamente conocida como rinorrea, es un síntoma tan común que a menudo lo pasamos por alto. Sin embargo, esa simple secreción acuosa esconde una compleja realidad fisiológica y puede ser indicativa de una variedad de afecciones, desde un simple resfriado hasta problemas más serios. Mientras que la imagen popular la asocia a un simple moqueo inofensivo, comprender sus causas y características nos permite abordar el problema de forma más eficaz.

Como se menciona en la introducción, la rinorrea se caracteriza por la salida de un líquido claro y acuoso de las fosas nasales, frecuentemente acompañada de congestión nasal, que dificulta la respiración y puede incluso afectar el olfato y el gusto. Esta secreción es el resultado de una inflamación de la mucosa nasal, o rinitis, causada por diferentes factores. En lugar de centrarnos simplemente en el “agua”, debemos considerar la calidad de la secreción: ¿Es transparente, espesa, amarillenta, verdosa o incluso sanguinolenta? Este aspecto, junto con otros síntomas, ayuda a determinar la causa subyacente.

Las causas más frecuentes de rinorrea acuosa incluyen:

• Resfriado común (rinitis vírica): Probablemente la causa más común. La infección viral causa inflamación, produciendo una secreción inicialmente transparente que puede volverse más espesa y cambiar de color con el tiempo. Suele acompañarse de otros síntomas como tos, dolor de garganta y fiebre.

• Rinitis alérgica: La exposición a alérgenos como el polen, el polvo o los ácaros del polvo doméstico desencadena una reacción inflamatoria en la mucosa nasal, resultando en una rinorrea acuosa, frecuentemente acompañada de picazón en la nariz, ojos llorosos y estornudos.

• Rinitis irritativa: La irritación de la mucosa nasal por sustancias como el humo del tabaco, contaminantes ambientales o ciertos productos químicos también puede producir rinorrea.

• Sinusitis: Si bien la secreción en la sinusitis puede ser más espesa y de color amarillento o verdoso, en etapas iniciales puede presentarse como rinorrea acuosa. Suele acompañarse de dolor facial y presión en los senos paranasales.

• Goteo posnasal: El exceso de mucosidad que se produce en la parte posterior de la garganta puede escurrir por la nariz, causando una rinorrea. A menudo se asocia con una congestión nasal posterior.

Más allá de estas causas comunes, la rinorrea también puede ser un síntoma de otras afecciones menos frecuentes, como tumores nasales, pólipos nasales o incluso ciertas afecciones neurológicas.

Es importante destacar que la automedicación no siempre es la mejor opción. Si la rinorrea persiste durante más de una semana, se acompaña de fiebre alta, dolor intenso o cambios en el color y la consistencia de la secreción, es crucial consultar a un médico. Un diagnóstico preciso permitirá un tratamiento adecuado y el alivio de los síntomas. No subestimemos el poder informativo de ese “agua por la nariz”; observarla con atención puede ser la clave para una pronta recuperación.