¿Qué pasa si me acuesto a las 1 de la mañana?

¿Qué pasa si me acuesto a la 1 de la mañana? Uf, esa pregunta me la he hecho mil veces. ¿Cuántas noches, con los ojos como platos, a esa hora maldita, me he dicho “cinco minutitos más” y luego me he despertado hecha polvo? Demasiadas, para ser sincera.

Dicen que acostarse a la 1 de la mañana está directamente relacionado con problemas como la depresión y la ansiedad. ¡Ay, qué miedo! Lo leí en algún sitio, no recuerdo dónde, pero me dejó pensando… ¿será cierto? Porque, ¿sabes?, hay épocas en que me cuesta horrores conciliar el sueño. Recuerdo esa época tan estresante con el trabajo, llegaba a casa a las diez, pero no veas, mi cabeza seguía a mil… ¡imposible dormir! Y claro, al final, me dormía a las tantas, agotada, pero igual de mal. Al día siguiente… ¡desastre total! Irritable, con la cabeza como una olla a presión, incapaz de concentrarme. Era un círculo vicioso del que parecía no poder salir.

Claro que hay gente que es madrugadora, y otra que es nocturna como yo… pero da igual el tipo, parece que las consecuencias de dormir tan tarde son negativas para todos. Es como si nuestro cuerpo gritara “¡auxilio!” a partir de cierta hora. Y ¡tiene razón! ¿Verdad que sí? Quizás debería intentar, de verdad, ser más disciplinada… aunque, ¡ay!, me cuesta tanto.

A veces pienso que debería haber un estudio que diga cuántas horas de sueño se pierden, al año, por esa hora de más en la cama. Seguro que son miles. Miles de horas que luego pagas con café, con falta de concentración… ¡hasta con más ansiedad! ¡Ironía de la vida!

En fin, debería hacer caso a los consejos. Priorizar mi bienestar, como dicen tan elegantemente. Ajustar mi horario… ¡fácil lo dicen! Pero lo intentaré, de verdad que lo intentaré. Al menos, lo intentaré mañana… o pasado… o cuando me acuerde.