¿Qué pasa si me contagio de Legionella?

Infección por Legionella: Consecuencias y prevención

¿Qué es la Legionella?

La Legionella es una bacteria que se encuentra comúnmente en fuentes de agua dulce, como lagos, ríos y sistemas de agua potable. Puede infectar a las personas cuando inhalan pequeñas gotas de agua contaminadas con la bacteria.

Síntomas de la infección por Legionella

La infección por Legionella, también conocida como legionelosis, puede causar una amplia gama de síntomas, que incluyen:

• Fiebre alta
• Escalofríos
• Tos
• Dificultad para respirar
• Dolor muscular
• Dolor de cabeza
• Náuseas y vómitos

Gravedad de la infección

La gravedad de la infección por Legionella varía ampliamente. Algunas personas experimentan síntomas leves que desaparecen por sí solos, mientras que otras desarrollan una neumonía potencialmente mortal.

Los factores de riesgo para desarrollar una infección grave incluyen:

• Ser mayor de 50 años
• Tener un sistema inmunitario debilitado
• Tener una enfermedad pulmonar crónica

Tratamiento de la infección por Legionella

La infección por Legionella generalmente se trata con antibióticos. El tipo específico de antibiótico utilizado dependerá de la gravedad de la infección.

Prevención de la infección por Legionella

No existe una vacuna disponible para prevenir la infección por Legionella. Sin embargo, existen medidas que se pueden tomar para reducir el riesgo de infección, que incluyen:

• Evitar las fuentes de agua contaminadas, como lagos y ríos
• Usar un humidificador o vaporizador con agua destilada
• Mantener los sistemas de agua potable limpios y libres de biofilm
• Ducharse con agua caliente y enjuagar los grifos regularmente

Conclusión

La infección por Legionella es una condición potencialmente grave que puede variar desde una enfermedad respiratoria leve hasta una neumonía mortal. Si presenta síntomas de infección por Legionella, es importante buscar atención médica de inmediato. Tomar medidas preventivas puede ayudar a minimizar el riesgo de infección.