¿Qué pasa si te intentas quitar un lunar?

¡Cuidado al intentar quitarse los lunares!

Los lunares son crecimientos cutáneos comunes, pero eliminarlos de forma inadecuada puede conllevar graves consecuencias. Antes de intentar quitarte un lunar, es fundamental conocer los riesgos potenciales.

Posibles complicaciones:

• Sangrado: Los lunares tienen vasos sanguíneos, por lo que quitarlos puede provocar sangrado. Si el sangrado no se controla adecuadamente, puede provocar anemia o incluso poner en peligro la vida.

• Cicatrices: Cualquier intento de quitar un lunar puede dejar cicatrices. Estas cicatrices pueden ser permanentes y antiestéticas.

• Infección: Si no se esteriliza adecuadamente el área antes de quitar el lunar, pueden introducirse bacterias en la piel, provocando una infección. Las infecciones pueden ser graves y requerir tratamiento con antibióticos.

• Recurrencia: Aunque se elimine la parte visible del lunar, la raíz a menudo permanece intacta. Esto significa que la pigmentación puede reaparecer con el tiempo, dando lugar a un nuevo lunar.

Riesgos adicionales:

• Cáncer de piel: En casos raros, los lunares pueden ser cancerosos (melanoma). Quitar un lunar canceroso sin el tratamiento adecuado puede propagar el cáncer.

• Infecciones de transmisión sanguínea (ITS): Si no se utilizan instrumentos estériles al quitar un lunar, se pueden transmitir ITS, como el VIH o la hepatitis.

Qué hacer:

Si te preocupa un lunar, es fundamental consultar a un médico o dermatólogo. Ellos pueden evaluar el lunar y determinar el método más seguro y eficaz para eliminarlo.

Los lunares que deben eliminarse incluyen:

• Lunares que cambian de tamaño, forma o color
• Lunares que sangran o pican
• Lunares que son molestos al frotarse con la ropa o las joyas

Conclusión:

Intentar quitarse un lunar por tu cuenta puede ser peligroso. Los riesgos potenciales superan con creces cualquier beneficio percibido. Siempre consulta a un profesional médico calificado para eliminar los lunares de forma segura y efectiva.